A las dos semanas de la operación, cómo máximo, puedes reanudar tu vida normal, pero si la gente se fija, notará que te has hecho algo.
El cambio no es de un día para otro. La mejora en la densidad capilar es progresiva, ya que los folículos van creciendo progresivamente, siendo un proceso muy paulatino cuyo resultado final se obtiene al año de haberlo realizado.
Si pones cierto cuidado, usas gorra una temporada y no te exhibes en exceso, ni siquiera tu entorno profesional relacionara la mejoría en tu aspecto con un trasplante capilar.
Al cabo de seis meses los resultados están, de media, cerca del 50%, y en un año, en torno al 100%.