"Veo difícil que el Perú retome su unidad mientras no nos atrevamos a la reconciliación, el perdón y la misericordia"
El indulto pedido por el expresidente Alberto Fujimori «ya está suficientemente maduro» para que el mandatario peruano, Ollanta Humala, tome una decisión que contribuya también a la unidad nacional, afirmó el Arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani, en una entrevista publicada hoy.
El cardenal peruano afirmó al diario Correo que el indulto «es un beneficio que está en manos del Presidente» cuando las circunstancias lo ameritan.
En tal sentido, Cipriani recomendó a Humala que no se esconda «en el médico o la ministra (de Justicia)» para retardar la decisión que espera la opinión pública.
Durante las últimas semanas se ha filtrado a la prensa el informe médico entregado a la Comisión de Gracias Presidenciales en el que se indica que Fujimori no padece de cáncer, aunque sí presenta un cuadro de depresión y otros males.
Esta comisión debe entregar un informe final al ministerio de Justicia sobre el cual Humala tendrá que tomar una decisión respecto al pedido de indulto humanitario.
Fujimori fue condenado a 25 años de prisión por abusos a los derechos humanos pero su familia pidió el año pasado a Humala que lo indulte por su grave estado de salud.
Cipriani opinó que «la división creada por el terrorismo (combatida durante el gobierno de Fujimori) no terminará mientras no haya una dimensión de reconciliación y perdón».
«Veo difícil que el Perú retome su unidad mientras no nos atrevamos a la reconciliación, el perdón y la misericordia», agregó.
Cipriani, muy cercano a Fujimori durante su gobierno (1990-2000), manifestó que Humala «puede dar un paso (al otorgar el indulto) que nadie le puede exigir, pero es imposible pensar que a todos va a gustar».
No obstante, insistió que «los grandes hombres dan pasos en la historia para cohesionar y sacar adelante a su país».
Consultado además sobre la ausencia de Humala en la misa de inicio de Pontificado del papa Francisco, Cipriani comentó que probablemente faltó alguien que le aconseje la importancia del momento latinoamericano.
«Estuvo (Rafael) Correa, estuvo Dilma (Rousseff), la misma Cristina (Fernández), a pesar de su distanciamiento con Bergoglio. Pero bueno, cada uno es dueño de sus decisiones«, concluyó. (RD/Agencias)