Valverde se hunde en la Dauphiné Libéré

(PD/Agencia EFE).- El francés Christophe Moreau, del Ag2r, se ha empeñado en demostrar que a sus 36 años vive su segunda juventud y se ha adjudicado el triunfo en la mítica cima del Mont Ventoux, punto final de la cuarta etapa de la Dauphiné Libéré, en la que el kazako Andrey Kashechkin (Astana) se ha puesto líder mientras se hundían su compañero Alexandre Vinokourov y el español Alejandro Valverde.

Moreau, que antes de esta edición no había subido a un podio desde 2004, ha conquistado su segunda etapa en tres días, y lo ha hecho a lo grande, en la cima pelada del Ventoux, donde llegó en solitario con un tiempo de 5h.51.52, con 1.05 de ventaja sobre el polaco del Lampre Sylvester Szmyd y con 1.22 de adelanto respecto al español Igor Antón, valiente en el tramo final, demostrando esas dotes de escalador que le llevaron en la pasada Vuelta a España a vencer en Calar Alto, el día de su presentación en sociedad.

En medio del destrozo general se han presentado en meta un grupo con los españoles Manuel Beltrán, Alberto Contador y Haimar Zubeldia, el australiano Cadel Evans, el ruso Menchov, el estadounidense Levy Leipheimer y el italiano Leonardo Piepoli. Todos ellos en torno a los 1:55 minutos. Nada se sabía del ya ex líder, Alexandre Vinokourov, que después de su demostración en la contrarreloj se ha dejado entre el paisaje lunar del Mont Ventoux 7.20 minutos, sembrando las dudas sobre su estado de forma a tres semanas del Tour.

Alejandro Valverde ha empezado a sufrir nada más empezar el puerto, en cuanto las primeras rampas asomaron ante la vista de los corredores. El murciano, quizás enfermo, no andaba, y ha terminado sufriendo un verdadero calvario en el peor escenario posible. De esta manera el doble subcampeón mundial se ha olvidado de la carrera y debe centrarse en recuperar las forma para el Tour. Kashechkin, el nuevo líder, ha asumido la responsabilidad cuando vio que su jefe de filas no funcionaba, y ha cumplido entre la maraña de favoritos.

A sus 25 años, el ganador en La Pandera el pasado año, se ha confirmado como una joya del presente, a tener en cuenta en el próximo Tour, como Antón, un corredor muy solvente en la montaña.

El ex corredor del Liberty, profesional desde 2001, está acechado en la segunda plaza por Moreau, a 14 segundos, el estadounidense David Zabriskie es tercero a 23, Menchov cuarto a 25 y Cadel Evans quinto con el mismo tiempo que el anterior.

Es decir, sin diferencias apreciables ante el tramo final de la prueba. Tres españoles se encuentran en el top ten de la clasificación. Alberto Contador, que cotiza al alza, es octavo a 3.12 minutos, Haimar Zubeldia noveno y Beltrán décimo, los tres con el mismo tiempo.

La jornada reina de la Dauphiné ha empezado con marcha. La escapada del día se ha formado enseguida, apenas pasado el km 2 cuando ha atacado el francés de origen italiano Sylvain Calzati (Ag2r), a quien se han unido en sucesivos ataques sus compatriotas Vasseur (Quick Step) y Augé (Cofidis) y el belga Willems (Liquigas), en un momento en el que el pelotón ni se planteaba el esfuerzo de anular el proyecto de aventura.

El cuarteto ha acordado la colaboración para abrir hueco y lo ha conseguido camino del Ventoux. En el km 85, en la cima de Repara-Auriples sacaban una renta de 9.15 ha tenido que tomar medidas para que tampoco se convirtiera la etapa en un despropósito para sus intereses.

Las diferencias han empezado a menguar a medida que se divisaba en lontananza la imponente silueta del «gigante de la provenza». Así, en el comienzo del ascenso, a 22 kms de meta, han surgido las hostilidades, y por lo tanto la fuga empezaba a disolverse, aunque Calzati, el más fuerte de los cuatro valientes, ha aguantado casi hasta el final.

Con Valverde más que tocado y Pereiro fuera de la lucha por la etapa, lejos de los favoritos, Vinokourov ha empezado su calvario particular a 10 kms de la cima y ha alzado el pie. Mientras, Moreau ha salido junto al polaco Szmyd en busca de Calzati y sus ex compañeros de escapada. Poco a poco el veterano francés fue remontando hasta quedarse solo en cabeza, sin ceder un metro al terreno ni regatear una pedalada al esfuerzo.

El grupo perseguidor se ha formado con Contador, Antón, Luis León Sánchez, Menchov, Evans y el propio Kashechkin, entre otros. Ya era tarde a 3 kms del final para atrapar a Moreau, aunque lo intentaron Szmyd y Antón.

El francés ha vuelto a vivir un momento de esos dulces, que no se olvidan por la grandiosidad del escenario. El «viejo» corredor galo volvía a renacer. El joven Kashechkin, en un epílogo agonizante, ha tenido la ocasión de tomar nota del maestro Moreau. Mañana de disputa la quinta etapa entre Nyons y Digne les Bains, de 195 Kms.

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