Acababa de oír al portavoz del PP de Extremadura, José Antonio Monago, referirse al Taller de Introducción al Onanismo Placentero para Niños (y Niñas), afirmando, más o menos, que era un desvarío dedicar 14.000 euros a semejante chorrada en una comunidad con más de 100.000 parados.

Entre ellos, miles de jóvenes con los que se podían usar esos fondos de manera mucho más adecuada. Para enseñarles a manejar otro tipo de herramientas, digamos, más útiles para alguna profesión algo más compleja que el son de la zambomba. Hay, pues, decía Monago, cosas mucho más importantes de las que ocuparse.

Hete ahí que me pongo, para acompañar mis humeantes carbonara, el Telediario de la 1 (los demás son de bochorno), y al poco escucho al busto eterno de Ana Blanco introducir la información masturbatiense, y me sorprende su afirmación de que el PP no le ha dado importancia al asunto, cuando yo acabo de oírle a Monago las descalificaciones ya señaladas. Finalmente, y tras Ana Blanco, lo único que se ofrece son las palabras de Monago en las que éste dice eso de que «hay cosas más importantes para ocuparse de ellas». Con un par. Le han cortado todo lo anterior, el contexto completo, y han convertido al PP extremeño en cómplice de la patochada. (En realidad lo es: en comunidades gobernadas por el PP se dan abundantísimos cursos de sexualidad a niños desde los 10 años. Antes a esa edad nos enterábamos de que los Reyes Magos eran los padres. En fin.)

Pero lo que nos ocupa es esa manipulación descarada, simplona, desvergonzada. Esta es la Teleplural. Y los del PP, consensuando. ‘Artutos’, que son unos ‘artutos’. Esperemos que haya servido para algo y que Oliart pueda poner coto a tanta ‘pluralidad’.