Durante más de 125 años, el puente de Forth ha transportado pasajeros sobre el estuario de Forth entre la capital, Edimburgo, y Fife, situados al este de Escocia.
El puente está hecho de 53.000 toneladas de acero templado (¡10 veces la cantidad usada para construir la Torre Eiffel!) creando una inmensa estructura roja con tres vigas en forma de diamante.
El puente es el sexto Sitio Patrimonio de la Humanidad de Escocia y fue construido por 4.500 hombres en un periodo de ocho años, terminándolo en 1890.
Se extiende dos kilómetros y medio entre los pueblos de South Queensferry y North Queensferry, convirtiéndolo en el puente voladizo más largo del mundo y el primer puente de acero de Gran Bretaña.
Celebra este símbolo dando un paseo o haciendo una ruta en bicicleta por la zona, y asegúrate de hacer una parada en uno de estos 10 miradores del puente de Forth cuando sea posible hacerlo.
