(PD).-Una conversación con el jefe de máquinas del «Playa de Bakio» evidencia el desánimo de la tripulación del atunero después de cinco días de secuestro. Los piratas somalíes que mantienen secuestrado el atunero ‘Playa de Bakio’ parecen haberse alejado de la costa donde habían fondeado el buque español por temor a ser atacados por grupos rivales.
Un pescador residente en Haradere, Abduqadir Ahmed, confirmó tal extremo y dijo que no habían visto al Playa de Bakio al navegar por la zona. «No hemos visto el barco cuando hemos ido a pescar. Creo que se han marchado en otra dirección después de recibir amenazas de los habitantes de la zona», observó.
El propio Abduqadir Ahmed reconoció que los salteadores se habían aprovisionado de alimentos y medicamentos en Haradere el miércoles por la noche.
Aunque el grupo al que se atribuye el apresamiento del navío, los tristemente célebres Marines Somalíes, dispone de un significativo potencial militar, lo cierto es que cuando capturaron el yate francés Ponant el 4 de abril ya sufrieron un violento encontronazo con otro clan de la zona que acabó con un muerto y varios heridos.
«Psicológicamente estamos mal»
Esta es la conversación que reproduce La Voz de Galicia con uno de los secuestrados.
-Hello.
-¿Sí?
-Hola, ¿me escucha bien?
-Sí, ¿quién es?
-Llamo de prensa, de España. Quería conocer la situación en el barco.
-De momento, no hay nada. Aquí, hasta que solucionemos esto.
-¿Siguen esperando a saber algo del rescate?
-Sí. Estamos esperando a ver. Pero no puedo hablar mucho, me están controlando. Tengo que dejar…
-¿Es usted el patrón?
-No, soy el jefe de máquinas (José Manuel Vaz Márquez, de 32 años y residente en el municipio pontevedrés de A Guarda).
-¿Están todos bien?
-Sí, estamos bien, sí. Estamos bien físicamente; psicológicamente, mal.
-¿Están todos metidos dentro del barco?
-Sí, pero a ver si salimos de aquí.
-¿Les han dicho cuáles son las condiciones que ponen para su rescate?
-No. No sabemos nada.
-¿Ellos les han tratado mal? ¿Mantienen la calma?
-No. Nosotros lo llevamos como podemos.
-¿Hay comida suficiente?
-Pues eso no lo sabemos.
-Pero ¿a ustedes les están dando de comer bien? ¿Les ponen problemas?
-A nosotros sí. Bueno, tengo que dejaros, que igual vienen por ahí.
