Alton Nolen, el tipo que intentó decapitar a una compañero de trabajo en 2014 y lo logró parcialmente, ha sido sentenciado a muerte por una corte de Oklahoma.
Traci Johnson trabajaba en una planta de procesamiento de alimentos cuando el tal Alton Nolen, hizo comentarios inquietantes.
«Dijo: Odio a los blancos y cosas así».
Johnson describió a Nolen como «pura maldad».
Rl tipo, fiel creyente en el Islam, había sido suspendido de empleo, despedido y por fin escoltado por los guardias de seguridad fuera de la propiedad, pero regresó más tarde ese día convertido en una furia mortal.
Tenía una lista en su bolsillo de objetivos previstos. Entre los ‘condenados a muerte’ estaban los empleados que recientemente había intentado sin éxito convertir al Islam.
El suceso tuvo lugar en la compañía alimentaria Vaughan Foods, explicó el portavoz del Departamento de Policía de la localidad de Moore, el sargento Jeremy Lewis.
Según la investigación inicial, el sospechoso, identificado como Alton Nolen, de 30 años, entró en cólera cuando le notificaron que había sido despedido.
LOS HECHOS
Primero fue al estacionamiento, condujo su vehículo hasta el frente del edificio, donde chocó contra otro vehículo, y tras bajarse entró por la entrada principal a la oficina. «Nolen se encaró y mató a Colleen Huffor con un cuchillo. Durante el ataque Nolen le cortó la cabeza a la víctima», indicó Lewis en un comunicado.
El sospechoso comenzó a atacar con el mismo cuchillo a Traci Johnson, pero fue detenido por los disparos de la policía, que había sido llamada al lugar.
Tanto la persona herida como el decapitador fueron hospitalizados y se recuperaron de sus heridas.
El suceso se produjo después de una serie de decapitaciones de ciudadanos occidentales que habían sido difundidas en las redes sociales cometidas por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) que operaban en Irak y Siria y estaba siendo combatido por una coalición internacional.
