Festival del humor este 30 de noviembre de 2018 en ‘Herrera en COPE’. Uno de los asuntos en la mesa de actualidad fue la celebración de la final de la Copa Libertadores en el estadio Santiago Bernabéu, en Madrid.
Santi González comentaba la pieza tildando de enésima ocurrencia la propuesta de Pedro Sánchez:
El doctor Sánchez ha tenido una ocurrencia nueva, no hay día sin chispa. Y aprovechando que iba en el Falcon a la cumbre del G-20 a punto de arrancar hoy en Buenos Aires, ha hecho una propuesta que nadie va a rechazar: Se subió al acuerdo de la FIFA, la UEFA, la Federación Española y el Real Madrid y ofreció Madrid para la celebración de la final de la Copa Libertadores entre el River y el Boca Juniors. Esa final había sido convocada y suspendida dos veces en Buenos Aires, tras graves disturbios. Hubo heridos, incluso entre los jugadores del Boca, cuyo autobús fue atacado a su llegada al estadio Monumental. Y vendrán los dos equipos y vendrán sus barras bravas, además de lo que podemos tener instalado aquí.
Con mucha guasa se preguntaba sobre la necesidad de traer aquí a más hinchas argentinos violentos teniendo en España unos ‘ejemplares caviar’:
Pero hombre, qué necesidad teníamos, si nosotros ya estábamos cumplidos con Echeminga, Pisarello, Dante Fachín y la monja Caram, esa improbable esposa de Cristo que se confesaba enamorada de Artur Mas, qué degeneración.
Herrera y González concluían con una gracieta asegurando que igual a los violentos les acabe aplacando el cacao que Manuela Carmena ha montado con Madrid Central
El reto se consumará el día 9 y Sánchez ha prometido un dispositivo de seguridad, ya veremos. De momento, y si las cosas salen mal, siempre podrá sacar pecho e invitar a Torra a que lo supere con sus CDR. O a que lo iguale. No descarten la posibilidad de que los autobuses con los equipos y sus barras bravas entren en la zona cero que ha dispuesto Carmena con el Madrid Central y lleguen al Bernabéu suaves como malvas.
Juan Velarde es redactor de Periodista Digital @juanvelarde72