El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, afirma que al líder del PP, Mariano Rajoy, le acompañan «sectores ultra muy perniciosos para la paz»· Además, cree que no se puede caer en un «entusiasmo exagerado» por el anuncio de EPPK de sumarse al Acuerdo de Gernika porque es un «paso», pero «no hace irreversible» el proceso.
En una entrevista al diario El Correo, recogida por Europa Press, manifiesta que es «impensable» una mayoría absoluta del PP en las elecciones generales y añade que le preocuparía «por la dureza de los ajustes sociales que conllevaría y también en lo que se refiere al País Vasco».
En concreto, precisa que no se fía del PP en «la gestión de un momento tan esperanzador como el que vivimos». «A Rajoy le acompañan sectores ultra muy perniciosos en lo que se refiere a la gestión de la paz. Me fío mucho más de Rubalcaba», añade.
Jáuregui puntualiza que «no habla de entorpecer, digo que no me fío» y señala que hay una «concepción ultra del fin de la violencia que no corresponde con la realidad y esos consejeros y corrientes están muy cerca e Rajoy». «Del PP vasco me fío más, honradamente, pero de Rajoy, de sus asesores y de sus influencias mediáticas y personales, no», añade.
En relación a las posibilidades del PSOE de cara a las próximas elecciones, asegura que es un partido «muy difícil» y que juegan «a la contra y en campo contrario», pero cree que «hay posibilidades» porque tienen el «mejor candidato».
Por otra parte, respecto a que Sortu pueda presentarse a los próximos comicios, indica que Sortu «tiene en sus manos que el Constitucional rompa la sentencia del Supremo». A su juicio, «basta» con que reclame de manera expresa la desaparición de ETA o que la condene.
Jáuregui señala que es «muy difícil» para un tribunal «negar una legalización con un pronunciamiento de esa naturaleza». El ministro socialista recuerda que el tribunal dictaminó que Sortu es Batasuna y añade que «es evidente que lo es». «Por ahora no está acreditada la separación de móviles y objetivos con la propia banda terrorista», añade.
BILDU
Asimismo, indica que la sentencia puede ser distinta, si en la fase de alegaciones «diesen un paso adelante», aunque indica que la experiencia de Bildu durante los últimos meses «no les ayuda».
En concreto, señala que han comprobado en los últimos meses que los representantes de la izquierda abertzale «no se transforman en representantes democráticos de la noche a la mañana».
A su juicio, Bildu ha «decepcionado mucho» y, en especial, a una parte de sus votantes. «Muchas de sus actuaciones están movidas por la gestualidad: que si dar un pañuelo a no sé quién o una carta a no sé cuántos. Algunas son de una radicalidad pre-democrática», añade.
Jáuregui cree que a Bildu le falta un «larguísimo recorrido» para ser un «auténtico partido democrático». «Es un ‘bluff’ y hay que denunciarlo. Bildu se está desinflando y más de cara a unas elecciones generales.», indica.
En su opinión, no será la primera fuerza en Euskadi en las próximas elecciones, pero asegura que tienen «todo el derecho del mundo de ir a Madrid si les eligen los ciudadanos». «Lo único que les pediría es que vayan a trabajar, a pactar, a hacer leyes y no a hacer el payaso o montar el circo», apunta.
EPPK
Por otra parte, en relación a la adhesión del colectivo de presos de ETA (EPPK) al Acuerdo de Gernika, manifiesta que hay que reconocer que «es algo que no se había producido nunca». «Se trata de un mandato expreso de los reclusos para que la banda mantenga su alto el fuego. Pero hay que dejar claro que no es un paso definitivo porque no exige a ETA su cese definitivo ni su disolución», añade.
A su juicio, este pronunciamiento no hace «irreversible» este proceso y señala que es un paso, «pero no el definitivo». «Los presos siguen envolviendo sus discurso en una suerte de negociación inadmisible para los tiempos que vivimos e inaceptable para las víctimas y para la sociedad democrática. Necesitamos la confirmación definitiva de que EA no va a volver y, desgraciadamente, no la tenemos. No podemos caer en un entusiasmo exagerado», advierte.
Jáuregui niega que este anuncio pueda dar pie a un cambio en la política penitenciaria y asegura que «lo único que abre la puerta a un nuevo tiempo es el anuncio de un cese definitivo de la violencia».
Asimismo, asegura que la condena al ex portavoz de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi por el caso Bateragune no cree que implique «alteraciones en los fundamentos de la llamada izquierda abertzale, más allá de que les hace un poco de propaganda».
