Blasco presenta su renuncia como diputado en las Corts un día después de saber su condena por el ´caso Cooperación´
Mucho se había especulado tras las elecciones europeas de las cábalas que estaba realizando el presidente, Alberto Fabra, para dar un impulso a su Gobierno y sacarlo del coma profundo -ya veremos si irreversible- en el que se había instalado tras la dimisión de Francisco Camps.
Fabra, limitado quizás por la falta de cantera, ha reducido sus cambios a uno y obligado: su vicepresidente, Pepe Císcar, quien había puesto su cargo encima de la mesa en varias ocasiones pero que habían sido neutralizadas por Génova, ve ahora atendida su petición pero a medias.
Y es que finalmente Císcar deja la portavocía del Consell en manos de la consellera de Educación, , quien será la persona encargada de dar cuenta (y la cara) viernes tras viernes de los temas abordados en el Consell.
Catalá, a quienes algunas malas lenguas en el PP llaman la presidenta en alusión a sus futuras opciones reales para ser el recambio de Alberto Fabra como cartel electoral, asume un complicado papel y aportará otro entusiasmo a la comunicación institucional.
No es un secreto que las relaciones entre Císcar y Fabra son distantes. Císcar no deja la vicepresidencia para mantener el equilibrio territorial (es de Alicante) en el Gobierno valenciano.
Y hasta aquí los cambios de Gobierno. Sin embargo, la próxima semana habrá novedades en el partido.
Fuentes solventes consultadas por El Semanal Digital dan por hecho el cese de Serafín Castellano como secretario general del PPCV. Castellano, discutido desde el minuto cero por Alfonso Rus o el propio Císcar, atesora una buena parte de las críticas orgánicas de los populares.
La primera valoración electoral tras el fiasco para el PPCV del 25-M (Castellano llegó a decir que estaba satisfecho) no ha hecho más que incrementar el descontento.
Para hacer más incruento el cese, Castellano podría pasar a ocupar la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana que en unos días dejará su actual titular, Paula Sánchez de León.
Muchos nombres hay sobre la mesa para el recambio de Castellano, uno de ellos cobra fuerza, Vicente Betoret, pero el elegido será bajo el consenso de Rus, Císcar y Javier Moliner -los tres presidentes provinciales- porque Fabra ya no quiere disensiones. No tiene más fuerza.