De entre todas las cualidades que el Rey Felipe VI reúne, su carácter llano y natural es probablemente la más señalada, y la clave del renombre que le significa, pese a que su compostura habitual pueda despistar y conducir a equívocos.
En pleno estado de alarma por la crisis del coronavirus, el sucesor de don Juan Carlos y su esposa han exprimido la madrugada del 21 de mayo de 2020 para visitar las instalaciones y puestos de Mercamadrid, la mayor plataforma de distribución, comercialización, transformación y logística de alimentos frescos de España, con el fin de conocer de primera mano su actividad durante la pandemia.
Perfectamente ataviados y protegidos con guantes y mascarillas, los Monarcas han llegado a las 5.30 horas, acompañados de Reyes Maroto, ministra de Industria, Comercio y Turismo, la vicealcaldesa Begoña Villacís y José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid.
Durante uno de los coloquios que los protagonistas han mantenido con los trabajadores y clientes, Felipe VI ha sorprendido con una sucinta frase que, una vez más, evidencia su cercanía y campechanía: «No habéis parado nada, macho», le ha expresado a un empleado después de que este le relatara las consecuencias que el COVID-19 ha generado en lo que a distribución se refiere.
“El aplauso lo merecéis todos vosotros”, ha añadido en esta cita, la segunda de carácter presencial que los Reyes han tenido esta semana y que supone el reinicio de una ‘nueva agenda’ inmersa en la ‘nueva normalidad’.
