La prestigiosa The Economist no deja lugar a la duda: España ha pasado de ser una «democracia plena» a una «democracia defectuosa». Terrible.
Alude la publicación a un informe de 2021 en el que detallan cómo en España el sistema democrático ha sufrido un directo retroceso: hasta seis puntos en el ranking que analiza precisamente la calidad a este respecto de todos los países.
Hasta 0,18 puntos ha perdido nuestro país (de los 8,12 de 2020 a los 7,94 en 2021), colocándose con Chile en este mismo punto de haber pasado de tener una democracia aceptable a una con defectos.
Hay cuatro razones que la publicación esgrime como implacables a la hora de haber otorgado este retroceso a España:
- la independencia judicial
- la fragmentación parlamentaria
- la corrupción
- el independentismo catalán
Y es que en España se han dado precisamente en los últimos tiempos tremendos vaivenes y conflictos en todos estos apartados: como la incapacidad de los partidos para ponerse de acuerdo a la hora de renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
¿Cómo considerarse una «democracia plena»?
España ha perdido el estatus que mantenía como democracia plena porque para estar en este nivel se tienen que mantener los 8 puntos como mínimo en este elaborado ranking. En la cabeza y a lo lejos aparece Noruega, con una nota de 9,75 sobre 10.
Impacto negativo de la pandemia en la libertad
Ni en el fondo ni en la forma se equivoca Isabel Díaz Ayuso cuando proclama libertad, porque a la vista está que la pandemia del Covid ha traído a España muerte, enfermedad y un notable recorte de libertades. El propio estudio lo señala:
«Los resultados reflejan el impacto negativo de la pandemia en la democracia y en la libertad en el mundo por segundo año consecutivo, con la extensión considerable del poder del Estado y la erosión de las libertades individuales».
En España, que el Tribunal Constitucional haya declarado inconstitucionales los dos estados de alarma decretados por el Gobierno y el cierre de la Cámara Baja durante las primeras semanas de la pandemia, ayudan directamente a esta situación deleznable para el país.
Ahora hay mucho terreno por recuperar en materia de libertades y de fiabilidad democrática, muy lejos de Afganistán -en lo más bajo de la lista- pero también a años luz de, Noruega la mejor clasificada.
