La principal novedad de este estudio la protagoniza Ciudadanos, que se sitúa prácticamente de igual a igual con los dos partidos que vienen alternándose en el poder desde hace más de treinta años
Quedan exactamente 10 semanas para las elecciones generales y eso en política es una eternidad, pero si hoy acudieran a votar los españoles, en lugar de hacerlo como esta previsto el 20 de diciembre de 2015, Albert Rivera tendría en sus manos el destino del país.
Ha tardado nueve meses, pero lo ha conseguido. Ciudadanos, que salió a la escena política nacional el pasado mes de diciembre, ha superado con creces en expectativa de voto a Podemos y se sitúa como tercera fuerza política nacional, pero muy cerca de PSOE y PP.
Estos dos partidos están en un virtual empate por lo que cualquiera de los dos podría ser el más votado en las elecciones del próximo 20 de diciembre, según elinforme de Metroscopia del mes de octubre, que publica ‘El País’ este domingo 11 de octubre.
El ascenso del partido de Albert Rivera se produce tras las elecciones catalanas del 27 de septiembre en la que superó a las fuerzas constitucionales.
La consolidación del multipartidismo parece un hecho incuestionable, aunque la principal novedad de este estudio la protagoniza Ciudadanos, que se sitúa prácticamente de igual a igual con los dos partidos que vienen alternándose en el poder desde hace más de treinta años.
Su líder, Albert Rivera, es el único candidato que recibe la aprobación mayoritaria de los consultados -saldo evaluativo- al margen de la opción a la que vayan a votar. Pablo Iglesias, líder de Podemos y Mariano Rajoy, presidente del gobierno y del PP, suscitan un fuerte rechazo.
El PP no logra crecer pero su línea es de estabilidad tras su gran caída del mes de noviembre de 2014 cuando perdió a más de la mitad de sus votantes de 2011.
El PSOE tampoco experimenta fuertes movimientos, acaso un leve descenso, aunque la línea de atracción de algunos de sus votantes hacia Ciudadanos, se compensa por la tendencia a retener votos que meses atrás podían ir a Podemos (Begoña Villacís: «Podemos tiene alergia a la sociedad civil»).
Izquierda Unida resiste y aunque sigue por debajo del nivel de apoyo que obtuvo en las anteriores elecciones generales se observa una ligera recuperación.
Solo Ciudadanos muestra en este momento la capacidad de atraer votantes por la izquierda y por la derecha.
LOS DATOS DE LA ENCUESTA
Según la encuesta realizada por la empresa Metroscopia en el mes de octubre, PSOE y PP empatarían con un 23,5% y 23,4% respectivamente en intención de voto, por lo que cualquiera de los dos podría ser el más votado en las elecciones del próximo 20 de diciembre.
Ciudadanos escala hasta la tercera fuerza, y con una intención de voto que haría temblar a los dos partidos mayoritarios, a los que pisa los talones con un 21,5%.
Este dato implicaría que Albert Rivera se posicionaría como hombre clave para la formación de cualquier gobierno, tanto a la derecha como a la izquierda.
Mientras que Ciudadanos consolida su tendencia al alza tras su triunfo en las elecciones catalanas el pasado 27 de septiembre, Podemos se afianza en su derrumbamiento, y pasa de las cotas máximas de intención de voto que ostentaba a principios de año, y que alcanzaban el 28%, a un 14% en este mes. Es decir, ha perdido 14 puntos en intención de voto en nueve meses.
IU sigue por debajo del nivel de apoyo que obtuvo en las anteriores elecciones generales, pero con una ligera recuperación, llegando al 5,6% en intención de voto.
Según El País, la encuesta apunta a que solo Ciudadanos muestra en este momento la capacidad de atraer votantes por la izquierda y por la derecha.
El estudio también refleja un clima propicio para la ruptura del bipartidismo: un 69% de los consultados estarían de acuerdo en que sería positivo que gobernase otro partido que no fuese ni PP ni PSOE.
Asimismo, un 68% desaprueba la gestión desarrollada por el presidente Rajoy.
El líder de Ciudadanos, por otra parte, es el único candidato que recibe una aprobación mayoritaria, mientras que el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y el presidente del Gobierno, suscitan «un fuerte rechazo».
