Un día después de que Lydia Lozano montase el ‘numerito’ y abandonase ‘Sálvame’ a lágrima viva tras una bronca con Kiko Matamoros, los colaboradores se vieron las caras y la tensión era evidente. Él dio un discurso certero e incendiario sobre cómo funciona el programa y ella se hizo la digna.
LA BRONCA: «ESTOY HASTA LAS NARICES»
El 10 de enero de 2012, Lydia Lozano dijo tener una exclusiva: Al parecer, Fran y Cayetano Rivera están muy indignados porque Isabel Pantoja le dio, durante las Campanadas, a su hijo Kiko Rivera (hermano por parte de padre de los otros dos) una medalla de oro que había pertenecido a Paquirri.
Kiko Matamoros, desde su asiento, gritó:
Estás muy equivocada Lydia. Me acaban de confirmar que tanto Fran como Cayetano no están en absoluto molestos. Hay cuatro medallas iguales. Una la tiene Fran, otra Cayetano, otra, alguien que no voy a decir el nombre y, ahora, otra la tiene Kiko.
Ella, de pronto rompió a llorar:
Estoy hasta las narices ¿Por qué tengo que aguantar todos los días que me desacredite este imbécil?
Lydia recogió su bolso, movió su rubia melena y se largó bajo un fuerte aplauso del público.
Esa misma noche, en su cuenta personal de Facebook, Matamoros escribió:
Ya estoy en casa. No entiendo el numerito final que se ha montado en el programa. Mi obligación es contarle a los espectadores la verdad acerca de los temas que se tratan y si Lydia Lozano o quien sea da una información incorrecta mi deber es corregirla si me consta que no es cierto. Apelar al victimismo y a las lágrimas me parece un exceso y una falta de profesionalidad y compañerismo. Una vez más el que falta a la verdad se convierte en víctima y de eso Lydia sabe un rato. Si ni Francisco y Cayetano Rivera están molestos porque la Pantoja le regale el cordón y la medalla a Kiko, mi obligacion es contarlo, entre otras cosas porque tienen otro cordón exactamente igual. Que cada uno asuma su responsabilidad y que cada palo aguante su vela, que para eso nos pagan entre otras cosas.
EL REENCUENTRO
Un día después, Kiko Matamoros y Lydia Lozano volvieron a verse las caras. Los dos tuvieron que aguantar el ‘rapapolvo’ de la audiencia que les transmitió María Teresa Campos. Y es que al público no le gusta el comportamiento bochornoso de ambos. Sobre la imagen que se tiene de Matamoros, de cruel y ‘malo’ con sus compañeros, el colaborador tenía algo que decir. Refiriendose a lo sucedido 24 horas antes, aprovechó para dejar varias cosas claras:
El que se siente agredido soy yo. Desde hace mucho tiempo. Me siento agredido por las lágrimas de Lydia, por los lamentos de Karmele Marchante, me siento agredido por una especie de campaña que se ha montado en mi contra y la única forma de desacreditarme es decir que soy un ser impasivo, agresivo, etcétera, etcétera, etcétera,..
Mire usted, yo vivo de dar información y de entretener y divertir a la gente. No tengo ninguna intención de hacer daño a nadie y menos a Lydia Lozano, a la que quiero y respeto desde hace muchos años. Y el que piense lo contrario, honestamente le digo que se equivoca. Podría dar más muestras pero no lo voy a hacer. La agresión y la violencia puede ser de distintas formas.
Una es levantando el tono de voz, a veces patino y lo hago, y otra es explotando las lágrimas porque yo vengo aquí a trabajar y a veces me salpican. Y me ha costado dormir, eso te lo aseguro. Y el victimismo.
Lydia, al lado de Matamoros parecía contenta con ser, de nuevo la protagonista de la historia y dijo:
A lo mejor ayer fue el día que menos agresividad tuvo Kiko para dar una información. Pero llega un momento que tras una, dos y tres… durante dos años que llevamos aquí… Llega un momento, que por la mínima pues explotas. De lo único que me arrepiento es de abandonar el plató. Y me fastidia mucho arrepentirme.
Querida Lydia, lo de aguantar «una tras otra» hasta que explotas es un eufemismo, ¿no? Explotas por «la mínima» todos los días. El caso es que al final hubo reconciliación y abrazo, pero Matamoros volvió a dar su visión del asunto horas más tarde en Facebook:
Buenas noches a todos: Estoy cansado. Esta tarde he tenido un sentimiento extraño. Por primera vez desde que estoy en Salvame he sentido que se rebasaban las barreras de lo razonable en cuanto a mi respecta. Tanta predisposición para favorecer a Lydia, después del patinazo de ayer, lo puedo entender, pero no me consta. Lo del público ha resultado anecdótico pero sintomático, el rol de Jorge Javier previsible, los mensajes a la defensora de la audiencia, aunque alguno francamente ridículo, esperados. Pero la linea editorial, el montaje de los vídeos y otros aspectos, inmerecidos, injustos, desmedidos….y…..No pretendo la protección de nadie, es mas, la rechazo, pero lo que no quiero es que se juegue conmigo con las cartas marcadas. En fin, no quiero decir nada de lo que me tenga que arrepentir. Buenas noches a todos. Muchas gracias por vuestra atención y a la mayoría por su apoyo. Sois cojonudos amigos .Suerte para todos,me incluyo.