Todo el mundo opina sobre ‘El Juego del calamar’, la serie de más éxito de la historia de Netflix. Algunas reacciones son más ‘sorprendentes’ que otras, como por ejemplo, la de Pablo Iglesias, que ha visto lo que ha querido ver.
Ya no se puede decir más de lo que se ha dicho de ‘El Juego del calamar’. Es un fenómeno cultural a pesar de ser una serie que no es excelente. No es mala pero tampoco es para tirar cohetes.
Un argumento que ya hemos visto mil veces (cientos de personas participando en un juego mortal para poder sobrevivir) y que, en esta ocasión, se juegan mucho, muchísimo dinero.
La serie, además de ser la más vista de Netflix, o eso dicen dese la plataforma, ha creado polémica porque en muchos colegios se ha denunciado que niños imitan las pruebas crueles que se muestran en la ficción.
Lo increíble, para empezar, es que los padres dejen a sus hijos pequeños ver una serie tan violenta.
El caso es que, sobre este fenómeno televisivo, el que fuera líder de Unidas Podemos ha escrito un artículo de opinión para Ctxt, uno de los medios en los que colabora tras su salida de la política.
Iglesias siempre ha sido muy aficionado a las series, incluso cuando era vicepresidente del Gobierno (y se suponía que no tenía mucho tiempo para ver temporadas completas) por lo que no ha podido evitar comentar ‘El juego del calamar’.
Iglesias ha querido barrer para casa y ver en la serie un mensaje político que le da la razón en ideología comunista:
Que no sea una obra maestra ni un manjar para cinéfilos no hace que El juego del calamar deje de ser, además de fenómeno cultural, un artefacto político de enorme potencia.
Iglesias recuerda que el creador de la serie, Hwang Dong-hyuk, la escribió como
una fácula acerca de la sociedad capitalista moderna, algo que representase una competición extrema.
Es aquí donde la serie me parece una proeza que consigue lo que no consiguió Los juegos del hambre, a saber presentar el capitalismo como una maquinaria de destrucción moral, como un sistema abyecto.
La serie permite restituir muchos universales éticos incompatibles con la lógica capitalista y sus valores.
Ridiculiza la creencia neoliberal de que el éxito es el resultado del esfuerzo y el mérito. Critica la explotación salvaje de los trabajadores migrantes retratando a un obrero pakistaní como ejemplo ético frente a la bajeza y el cinismo de un estafador financiero
Sí, es verdad, ‘El juego del calamar’ critica el sistema capitalista pero también el comunista. De eso se ha olvidado hablar Pablo Iglesias.
En la serie hay referencias directas e indirectas al comunismo. Para empezar, una de las protagonistas ha escapado del terrible régimen de Corea del Norte. Es una víctima terrible de ambos sistemas.
Además, los ‘creadores’ del juego tienen una orden muy clara: que todos los concursantes sean iguales y tengan las mismas condiciones y oportunidades. ¿A qué ideología pertenecen esas directrices?
Si hablamos de ‘El juego del calamar’ hablemos de todo. ¿No?