(o «Es que esas cosas pasan»).

Con motivo de una noticia de Libertad Digital, cuya entradilla dice “Huelga salvaje en Pinto” y cuyo titular es así de explícito: Huelga en Pinto: “Hay que ser extremista. Al que vaya a currar, hay que arrastrarle”; con tal motivo, repito, mi señoría se ha visto en la necesidad de hacer un Comentario al respecto, en los siguientes términos:

“No les digo lo que hay… Por eso uno, que está en todo, ya escribió hace un año un post titulado «Presunto protocolo de erradicación de huelgas», que publicose tanto el Periodista Digital como en Libertad Digital, ambos inclusive, y que pueden leer o bien en

http://blogs.periodistadigital.com/cajondesastre.php/2012/10/29/p323663
o, si lo prefieren, en

http://blogs.libertaddigital.com/SORT7643

Y contra los piquetes mal llamados informativos, propone que se les imponga tanto a sus ´miembras´ como a sus miembros, el castigo de pena de trullo revisable. Que si no, luego pasa lo que pasa, y no hay que tomárselo a guasa”.(Fin del Comentario).

Pues bien, tras el citado comento, mi señoría relee lo que escribiera o escribiese hace más de un año, en el enlace dado, y advierte que en el presunto decretazo que en el tal link se preconiza, olvidado se ha (sí, sí, mi señoría) de incluir una alusión a los llamados piquetes informativos que, como saben hasta los más imbéciles de los lectores y vuesarcedes ni que decir tiene, son más bien piquetes coactivos. En otras palabras: se trata de grupos de trabajadores que no solo siguen la huelga que sea sino que además impiden, en algunos casos con violencia manifiesta, que los no huelguistas que quieren acudir al trabajo y que tienen derecho a ello, vayan al tajo a sudar la camiseta. Como paradigma de lo que a veces recomiendan algunos sindicatos a estos piquetes baste ver lo que se dice en la noticia que uno viene comentando y que está, como queda dicho en L. D. Frases como a «El que ha ido a currar sabía a lo que se arriesgaba. Quien vaya a los servicios mínimos que trabaje al 1% no al 100% que son servicios mínimos», «Si os enfrentáis a compañeros que quieren reventar la huelga, vuestra obligación es no dejarlos pasar. No sintáis remordimientos”, «Si te toca servicios mínimos tendrás que ir, pero a lo mejor luego no los puedes hacer. A lo mejor se te rompe la escoba. Pues mala suerte. Esas cosas pasan», «Hay que ser extremista porque hoy por hoy se requiere. Y si hay que ir en contra del que vaya a ir a currar y arrastrarle, hay que arrastrarle. Sólo pido que los cuatro que vayamos -se refieren al denominado piquete informativo-, si van diez tenemos que arrastrar a los diez y sacarlos fuera, y ya está»; pues frases como éstas, que mi señoría se ha limitado a transcribir de la noticia citada, respetando escrupulosamente las comillas, les darán a vuesarcedes una idea del ´modus operandi´ de algunos de esos piquetes (¿informativos?).

Y puesto que en mi citada chirigota, al preconizar un decretazo para erradicar huelgas no me referí a los piquetes en cuestión, hágolo ahora de buen grado para que esta referencia sirva de adenda al presunto dictamen de la autoridad competente. Y dado el poder de síntesis de mi señoría para evitar que esta chirigota se alargue innecesariamente, acepten que a esta síntesis le dé formato de letanía y, en latín decadente, diga: “Ad piquetes sindicatorum obrerum violentum, libéranus, autoritas imperante”. Y si la autoritas imperante nequaquam et piquetes infringent normativa vigentibus, caiga super eos, ómnium pesum legis et multatus sint sicut dicat Montorus, minister oeconomi vel alterum cerebrum excelsum qui sucedat eum. Et chimpún. ¿O no?

13-12-2013.