Cajón de Sastre

Rufino Soriano Tena

Peripecia de mi señoría.

Dice la RAE, acerca de la segunda acepción de la palabra “peripecia”, que es “en la vida real, accidente imprevisto o cambio repentino de situación” y, por ende, he titulado correctamente esta crónica de hoy porque sentido he un “cambio repentino de situación” al pasar de estar arrellanado en mi butaca, contemplando la tele, callado como un muerto, a venirme al ordenador y, habiendo leído el sintagma con que Isabel San Sebastián bautiza hoy a su columna de ABC y parte de su texto, me he dicho: esto merece una chirigota de las que con frecuencia les endilga mi señoría a vuesarcedes, porque eso de que “Sánchez dimite por vergüenza torera” no es ninguna tontería. Y es que ella, la columnista, va, muy seria, y bajo ese epígrafe nos espeta a los lectores: “El presidente del Gobierno ha dimitido. El anuncio pilló a todos por sorpresa a última hora de ayer, cuando Pedro Sánchez, de vacaciones en la finca Quintos de Mora, comunicó a través de un tuit su “decisión irrevocable de renunciar al cargo que no he sido capaz de honrar con la competencia, lealtad y dedicación que exigían de mi la Constitución y el pueblo español. Consciente de mi impotencia en estos momentos dramáticos para la Nación, me voy por vergüenza torera”. E Isabel prosigue luego haciendo elucubraciones y cuenta, por ejemplo, que fuentes de la Moncloa aseguran que “el presidente está descansando y no concede entrevistas” mientras la ministra Portavoz estuvo ilocalizable durante toda la jornada de ayer. A falta de información, en los mentideros madrileños se multiplican las conjeturas. Y a partir de esto, la periodista empieza a hacer hipótesis de por qué podría haber tomado don Pedro esta decisión y acaba contando que “entre los periodistas que siguen al presidente han causado especial desconcierto las últimas palabras incluidas en el tweet: “Me voy por vergüenza torera”. “¿Vergüenza torera?”– ha comentado a San Sebastián una colega de sus ruedas de prensa sin preguntas-: “De lo primero anda escaso y en cuanto a lo otro, dudo que jamás haya visto un toro de cerca”.

Y tras eso, la columnista nos suelta un PD. que nos deja patidifusos. Éste: “El lector avezado habrá caído en que hoy es 28 de diciembre y esta columna corresponde a la tradición de publicar alguna inocentada, arraigada desde antiguo en las páginas de ABC”.

Menos mal, porque menudo desasosiego estaba causándonos lo que estábamos leyendo. Y es que ahora que, gracias al Gobierno cuyo Presidente es -y no sabemos hasta cuándo- el Doctor don Pedro Sánchez se han aprobado los Presupuestos Generales del Estado, asimismo se ha aprobado también la reforma laboral, se ha tranquilizado el terremoto de Canarias, se nos ha prometido la reducción del coste de la energía eléctrica, etc. etc. etc.; ahora que, repito, gracias a este excelente Gobierno con este magnífico presidente se ha conseguido todo eso y mucho más, van vuesarcedes y la cagan, por no decir la defecan. Así es que, por favor, sean serios y coherentes. A un Presidente del Gobierno así no se le puede permitir que dimita: ha de continuar su excelente tarea hasta que las urnas no le sustituyan por otro. ¿O no?

 

28-12-2021.

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Autor

Rufino Soriano Tena

Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Granada y Licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Comillas (ICADE) de Madrid

Rufino Soriano Tena

Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Granada y Licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Comillas (ICADE) de Madrid

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