Sin duda, un embarazo supone todo un desafío para el cuerpo y el organismo de la mujer. Durante el mismo, la alimentación de las gestantes resulta esencial, para asegurar que el futuro bebé reciba todos los nutrientes necesarios para su correcto desarrollo. Así, ¿sabías que es recomendable tomar complementos de ácido fólico varios meses antes del propio embarazo?
Tanto es así, que se aconseja su consumo con carácter previo a todas aquellas mujeres que tengan intención de quedarse embarazadas próximamente, dado que su carencia puede ocasionar graves perjuicios en la formación del embrión.
En concreto, el ácido fólico se ha revelado como activo fundamental para prevenir malformaciones. En este sentido, hablamos de una vitamina del grupo B, cuya ingesta está recomendada al menos un mes antes de lograr el embarazo, así como durante toda la gestación. Su acción previene posibles y graves defectos de nacimiento, tanto en el cerebro como en la columna vertebral del bebé.
Este último problema es conocido como la espina bífida, e implica que el tubo neural no se cierre por completo ni se desarrolle apropiadamente. Esto conlleva defectos en la médula espinal y en los huesos de la columna que, sin duda, ocasionarán –entre otros inconvenientes en su salud– problemas de movilidad al niño (aunque todo dependerá de la gravedad del caso). Su déficit, incluso, incrementa el riesgo de aborto y hasta la posibilidad de presentar preeclampsia.
Por lo tanto, desde diferentes organismos se han lanzado campañas dirigidas a mujeres en edad fértil, para concienciar acerca del papel fundamental que desempeña esta vitamina. No podemos olvidar que los diferentes estudios realizados hasta la fecha han demostrado que, un gesto tan sencillo como consumir la cantidad recomendada de ácido fólico tanto antes como durante el primer trimestre del embarazo, podría prevenir hasta un 70% defectos congénitos como hidrocefalia, espina bífida, labio leporino, anencefalia, paladar hendido, hipotiroidismo, retardo, etc.
Por este motivo, muchas mujeres con deseos de quedarse embarazadas se ponen en manos de sus ginecólogos, para que las guíen acerca de las pautas más adecuadas para lograr un embarazo sano. Por supuesto, una vez logrado, la matrona indicará a la gestante la idoneidad de seguir tomando complementos no solo de ácido fólico, sino también de hierro (pues algunas mujeres presentan anemia sobre todo durante el segundo trimestre), omega 3, u otros muchos micronutrientes adecuados tanto para la salud de la futura madre, como para el desarrollo del futuro bebé.

