¿Se puede volver a practicar deporte tras haber sufrido un infarto? Sí, pero la intensidad y el tipo de ejercicios variarán en función de la situación en la que ha quedado el corazón.
Tal y como señala Araceli Boraita, miembro de la Sociedad Española de Cardiología y jefa del Servicio de Cardiología de la Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte, antes de empezar a practicar ejercicio hay que averiguar cómo está la situación del miocardio, si el paciente tiene isquemia miocárdica o no, y si hay presencia de arritmias al practicar deporte. Todo esto lo valorará el cardiólogo, según recoge cd y comparte Paula Dumas para Periodista Digital.
La experta explica que el mejor deporte que se puede realizar tras sufrir un infarto es aquel que más masa muscular mueve, el que es más fácil de dosificar y controlar.
“La carrera a pie, es el mejor ejemplo”, añade. “Pueden practicar desde la media hasta la larga distancia; ambas mucho menos intensas que las carreras de velocidad o las de corta distancia. Este sería uno de los deportes más aconsejables”.
Respecto a las recomendaciones que deberán seguir, Boraita destaca dos:
Tener en cuenta si ha practicado antes deporte. Si es que no, lo primero que tiene que hacer es pasar por un programa de rehabilitación cardiaca que de alguna forma le acondicionaría para estar listo para el ejercicio físico.
Preguntar al cardiólogo. Debe plantearle que quiere hacer deporte, el experto le recomendará las actividades que se adaptan mejor a su situación y a qué intensidad debe realizarlas.