(PD).- La crisis financiera ha situado al sector turístico en uno de los momentos más delicados de su historia.Así lo reconoce la la Organización Mundial del Turismo que ha anunciado una preocupante ralentización del crecimiento de los últimos años.
El parón es visible ya en Francia, el primer destino turístico mundial, y en España, su principal rival europeo.
Tras cuatro años de éxito, «el turismo vive uno de los peores reveses de su historia», según el subsecretario general de la OMT, Geoffrey Lipman, quien reconoció que «las perspectivas para 2009 son preocupantes» y no se prevé «recuperación en el primer semestre».
Según los datos que maneja la OMT, la crisis financiera ha causado una desaceleración en el crecimiento del turismo internacional.
