Hoy, en Andalucía hay registradas 1224 instituciones religiosas no católicas
(Jesús Bastante).- ¿Cómo viven, se sienten, trabajan, se integran y se relacionan las minorías religiosas en Andalucía? ¿Cuántos son, cómo se organizan? A estas y a otras cuestiones da cumplida respuesta «¿Y tú (de) quién eres?» el séptimo volumen de la colección con la que la Fundación Pluralismo y Convivencia quiere cerrar el mapa del pluralismo religioso en España. En esta ocasión, el estudio se ha centrado en una de las Comunidades Autónomas más grandes y plurales -religiosamente hablando- del país: Andalucía. Hoy se presenta en Sevilla.
«La pluralidad religiosa no es una realidad nueva en Andalucía -constata el director de la Fundación, José Manuel López-. Pero este estudio nos permite conocer, además, cuál es la fotografía actual de la situación y su origen, y nos enfenta a un reto, la normalización social de esta pluralidad religiosa.
Por su parte, el coordinador de este estudio, Rafael Briones, recalca cómo «el campo religioso ha cambiado radicalmente en España en los últimos treinta años por diferentes factores: a-confesionalidad del estado de la nueva constitución , las multireligiosidades incrementadas desde los años 90 (inmigración)y el proceso de secularización-descatolización de la sociedad española».
Hoy, en Andalucía hay registradas 1224 instituciones religiosas no católicas. Muchas más que hace tres décadas. «Las minorías religiosas han perdido el miedo a ser controladas«, explica el experto. Musulmanes y evangélicos son mayoría, con un sensible presencia, no obstante, de budistas e hinduistas. El Islam y las Iglesias Evangélicas están muy fragmentadas, descoordinadas y a veces enfrentadas por carecer de una estructura jerárquica y por tener los grupos gran autonomía. Uno de las tareas pendientes de estos grupos es el de resolver su coordinación y federación para poder tener un interlocutor válido con las instituciones sociales y del Estado.
Tal y como explica Briones, la investigación «no era cuantitativa (por encuestas). Es difícil o imposible por tratarse de una población en gran parte «oculta» (por razones de invisibilidad, falta de registro o sospecha que oculta identidad) y por ser una temática (la pertenencia religiosa o la religiosidad) difícil de medir (problema de indicadores)».
Los resultados, así, son cualitativos. A partir de los datos en las entrevistas, se hace una etnografía de los diferentes grupos. Y con una perspectiva comparativa se tratan algunas cuestiones transversales a todos los grupos:
• El proceso de institucionalización de los grupos religiosos: un camino hacia la «formalización» y la «normalización».
• La estructura y funcionamiento de dichos grupos (intento de tipologías más frecuentes)
• La visibilidad de la diversidad religiosa
• Las actividades de las «otras» religiones
• Los espacios de culto y los cementerios
• Las necesidades materiales y de recursos humanos de estas minorías
• El diálogo en el pluralismo religioso en la España actual.
Además de la de Andalucía, ya se han editado los informes relativos a Cataluña, Valencia, Madrid, Canarias, Castilla-La Mancha y Aragón, y en los próximos meses verán la luz las investigaciones sobre la realidad de las minorías en Navarra, Murcia, Euskadi y Extremadura. Cada vez parece más cercana la culminación de un trabajo que permitirá elaborar un mapa acerca de la diversidad y pluralidad religiosa en nuestro país.