El sentir general de la plantilla apunta a que habría sido preferible respetar la pareja de centrales Pepe-Ramos y ocupar las bandas con otros jugadores
La derrota que sufrió el Real Madrid el pasado martes ante el Borussia de Dortmund no preocupó en exceso al técnico blanco: José Mourinho aseguró que no era «dramático» no ser primeros de un grupo «que no es de broma«.
Pero más allá del resultado, una parte del vestuario no vio acertada la alineación elegida por el portugués, así como algunas de sus decisiones técnicas que, a juicio de ciertos jugadores, influyó negativamente en su juego.
Son varios los reproches a nivel interno dentro del vestuario blanco pero, principalmente, se cuestiona una decisión: la de alinear a Essien como lateral izquierdo.
Como reveló ‘El Economista’ hace unos días, los españoles del Real Madrid no veían con buenos ojos que se diera de lado a la cantera para remediar las bajas en el costado zurdo, en favor de un jugador que apenas cuenta con experiencia en esa demarcación.
Y ahora, ese juicio se ha contagiado en el resto de la plantilla.
Según cuenta en sus páginas Marca, algunos futbolistas del Madrid consideran que el entrenador luso no debió haber trastocado tanto los planes por las bajas, especialmente en defensa.
El sentir general de la plantilla apunta a que habría sido preferible respetar la pareja de centrales Pepe-Ramos y ocupar las bandas con otros jugadores: en el carril derecho, con Albiol o el propio Essien, que es diestro y sí tiene experiencia en esa posición; y con canteranos como Nacho o Casado, lateral zurdo del Castilla, en la banda izquierda.
Pero, más allá del rompecabezas mal encajado en defensa según la opinión de buena parte del vestuario, también hay críticas internas hacia la gestión de los cambios ejecutados por ‘The Special One’ en Dortmund.
Hay quienes piensan que, tras la lesión de Khedira, Mourinho tenía el mejor pretexto para arreglar el desaguisado, llevando a Essien a la zona de contención en mediocampo y sacando Albiol para ocupar el lateral derecho desplazando a Ramos a la izquierda.
Cabe recordar que el técnico luso había dejado fuera de la convocatoria a Nacho, pese a no contar con ningún otro jugador especialista en esa zona de la defensa.
Por último, en el seno del vestuario del Real Madrid tampoco entendieron que, con el resultado de 2-1, Mourinho diera salida a Higuaín en lugar de Benzema, que parecía más enchufado en la segunda parte, renunciando así a una alineación más ofensiva que fuera al menos a por el empate.
Máxime cuando a jugadores como Özil se les advertía notablemente cansados por el esfuerzo.