El caso de Aminatu Haidar preocupa a la opinión pública. Presento aquí documentos importantes para conocer la verdad. Ahora el caso está en manos del juez Eloy Velasco, de la Audiencia Nacional. Para evaluar la trascendencia de este caso y el grado de cinismo mostrado por el ministro Moratinos creo que es conviene conocer los hechos. En este primer artículo voy a reproducir textualmente, el relato que hace Aminatu Haidar de su detención e interrogatorio en la denuncia que presentó en la comisaría del Aeropuerto de Lanzarote. Completaré el relato con otros detalles de la detención ofrecidos por la prensa oficialista marroquí y por uno de los periodistas que acompañaban a Haidar (Pedro Barbadillo). Estimo que pudieran ser de interés para el juez.
I. DENUNCIA PRESENTADA POR AMINATU HAIDAR EL 15 DE NOVIEMBRE DE 2009 EN EL AEROPUERTO DE LANZAROTE (primera parte)
MINISTERIO DEL INTERIOR
DIRECCIÓN GENERAL DE LA POLICÍA
J.S.P. DE CANARIAS
COMISARÍA DE ARRECIFE
Aeropuerto de Lanzarote
Diligencias nº 8377/09
Instructor: 81.560
Secretario: 81.560
[Aquí se reproduce la primera parte de la denuncia»la detención e interrogatorio en El Aaiún»; consulte aquí la segunda parte «expulsión de El Aaiún por Marruecos en complicidad con España«, la tercera parte «entrada ilegal en España y la prohibición de salir rumbo al Sahara Occidental» y la cuarta y última parte «la humillación y escarnio por las autoridades españolas«]
DILIGENCIA INICIAL-
Se extiende siendo las 10 horas y quince minutos del día 15 de noviembre de 2.009 en el aeropuerto de Lanzarote, por el Inspector de Policía con C.P. 81.560, Instructor y Secretario arriba mencionados, para hacer constar que en este acto se persona quien mediante permiso de residencia en España nº X8313505-V acredita ser y llamarse Aminatou Haidar, (…)
Y MANIFIESTA:
—Que la dicente llegó el viernes 13 de noviembre al Aaiun en vuelo NT 6100 procedente de Gran Canaria.
—Que en el mencionado vuelo iba en compañía iba en compañía de los periodistas españoles (independientes) Pedro Barbadillo y Pedro Guillén. Le acompañaban los referidos ya que iban a realizar un documental en territorio Saharaui sobre la vía de la dicente, todo ello haciéndolo coincidir con la reciente mención honorífica que había recibido en Nueva Cork (sic) (Premio al Coraje Civil 2009 de la Train Fundation [sic]).
— Que la compareciente cuando llegó en el mencionado vuelo sabía de los incidentes ocurridos el pasado octubre en el Aeropuerto de Casablanca, donde la policía Marroquí detuvo a un grupo de siete activistas Saharauis, defensores pro derechos humanos, privando a otro grupo de seis Saharauis de su documentación y prohibiéndoles salir de territorio Saharaui. Como quiera que a su llegada en el mencionado aeródromo vio a un nutrido despliegue policial pendiente de su llegada, la dicente consideró que correría la misma suerte que sus compañeros Saharauis.
—Que después de cruzar la puerta de la Terminal y cuando estaba esperando su turno en la fila del control policial, portando ya su pasaporte y tarjeta de llegada, se dirigió hacia su persona el Comisario de Policía Falah Mohamed quien le pidió su documentación y le dijo que le acompañase. Alejándose por este motivo del resto de pasajeros fue conducida, saliendo de nuevo a la zona aire, por un pasillo interno a dependencias policiales, todo ello para así evitar cualquier encuentro con algún familiar o persona conocida que le estuviese esperando.
— Que una vez en dependencias policiales llegaron los distintos cuerpos de seguridad e inteligencia encabezados por el Jefe Provincial de la Policía (Sr. Ermid) el Jefe de de la Policía Judicial (Sr. Aboutayeb), otros Oficiales de Policía Judicial, un Oficial de la DST (Policía Secreta Marroquí), un Oficial de la RG (Brigada de Información General), un Oficial de la DAG (Departamento Asuntos Generales), el Comisario del aeropuerto y un Oficial de la Gendarmería.
— Que en las referidas, procedieron a un interrogatorio policial desde las 13 horas hasta 03 horas de la madrugada, de forma continua y bajo presión psicológica constante, grabando su imagen y el escenario con tres cámaras de video manuales y también haciéndole fotografías de forma continuada, utilizando el dispositivo flash en toda ellas, a sabiendas de la debilidad ocular por ellos conocidos (sic). Afección que le fue provocada por los cuatro años años que pasó la dicente en un centro de detención marroquí con vendaje en los ojos durante la misma sin recibir asistencia.
— Que durante el referido, y a las 22’30 horas de ese viernes día 13, trajeron a su tío y a otros dos funcionarios Saharauis al objeto de incrementar la presión, estando presente también el Procurador del Rey (Fiscal).
— Que el aludido interrogatorio policial se reanuda de nuevo a las 8 de la mañana del sábado día 14 y a las 10.45 horas el Comisario Provincial Sr. Ermid le informa a la dicente que se prepare para marcharse, sin indicarle cual iba a ser su destino.
(…)
II. LA DETENCIÓN SEGÚN LA PRENSA OFICIALISTA MARROQUÍ
Este es el relato que hizo el diario Aujourd’hui le Maroc, próximo al ministro de Asuntos Exteriores Taieb Fassi-Fihri, en su edición de 16 de noviembre:
Detención de Aminatu Haidar en el aeropuerto de El Aaiún
Aminatu Haidar, cabeza de los «separatistas» del interior, ha sido detenida, el viernes 13 de noviembre, por los servicios de policía del aeropuerto Hassán I de El Aaiún. El sábado, ha embarcado con destino a las Islas Canarias.
Los servicios de policía del aeropuerto Hassán I de El Aaiun han detenido, el viernes 13 de noviembre, a la llamada Aminatu Haidar al descender del avión, después de haber rechazado cumplir las formalidades de policía. Ante su rechazo a cumpllir estas formalidades, la interesada ha sido sometida, el viernes por la noche, a un examen de situación en la zona internacional del aeropuerto por la policía de fronteras, bajo la autoridad del fiscal. Al día siguiente, Aminatu Haidar ha embarcado a bordo de un avión desde el aeropuerto de El Aaiún con destino a las Islas Canarias, lugar de su procedencia.
Según los servicios del aeropuerto, la llamada Aminatu Haidar ha rechazado su nacionalidad marroquí ante los servicios de policía del aeropuerto de El Aaiún, afirmando ser titular de otra nacionalidad, lo que constituye un acto de traición muy grave. Varios miembros de la familia de la llamada Aminatu Haidar han podido discutir con ella y asistirla en la firma de sus declaraciones hechas en presencia del fiscal, en las cuales ha rechazado claramente su nacionalidad marroquí.
La constancia de los hechos es que la interesada ha rehusado cumplir las formalidades de la policía a su llegada al aeropuerto de El Aaiún, especialmente la ficha de desembarco que conlleva, como exige la reglamentación internacional, informaciones sobre su identidad y residencia.
Fuentes policiales han afirmado a Aujourd’hui le Maroc que Aminatu Haidar se ha contentado con cubrir la casilla de la nacionalidad del viajero señalando que es titular de la nacionalidad saharaui. Una nacionalidad que no está reconocida por la ONU, lo que constituye una provocación a los funcionarios del aeropuerto y a los servicios de seguridad.
Aminatu estaba acompañada de dos periodistas españoles, que fueron a las «provincias del sur» sin respetar las leyes marroquíes en vigor que exigen una autorización del ministerio de la Comunicación, que vela por la regulación del trabajo de la prensa extranjera. Antes al contrario, los dos periodistas han hecho prueba de una gran parcialidad, a pesar de la conminación de las autoridades que les han notificado que eran persona non grata. Han continuado desafiando a las autoridades locales, que les han confiscado su cámara de video y de fotografía, pero la secuencia que contiene los momentos de la detención de Aminatu Haidar no fue encontrada.
Poco tiempo después, la secuencia de la detención fue encontrada escondida en una azafata, de nacionalidad española, que se encontraba a bordo del mismo avión que transportaba a los periodistas españoles. Esta azafata ha faltado a su obligación de neutralidad. Tras tener noticia del incidente, el piloto del avión ha realizado un informe inmediatamente conteniendo las infracciones por esta azafata de su deber, informe que debía transmitir a sus superiores para que tomen las medidas necesarias.
La llamada Aminatu Haidar es titular de un pasaporte y de una carta de identidad nacional marroquíes que le han permitido viajar por el mundo entero para defender la causa de los «separatistas». Aminatu Haidar es funcionaria del Ayuntamiento de Bojador y continúa cobrando su salario del Estado marroquí en cuanto asalariada ficticia.
El 116-11-2009 a las 09:06
Por : Mohamed Laâbid
De nuestro corresponsal en El Aaiun
III. EL RELATO DE LA DETENCIÓN POR EL PERIODISTA PEDRO BARBADILLO
Reproduzco el relato hecho por Pedro Barbadillo, tal y como se ha publicado en el blog Sahara Resiste el día 27 de noviembre.
El relato de las detenciones,
por Pedro Barbadillo
El relato de los hechos está en casi todos los periódicos de los últimos dias. Te lo resumo aqui: Estoy realizando un documental sobre Aminetu Haidar, titulado ‘Con el viento de cara’, y cuando ella me dijo hace unas semanas que iba a regresar a El Aaiun, y que probablemente la detendrían al llegar, decidí acompañarla con un cámara, Pedro Guillén, al que contraté en Las Palmas. (El cámara con el que he grabado la mayor parte del documental estaba en otro rodaje, y no pudo venir).
Nos citamos en el aeropuerto de Las Palmas, el viernes 13.11 a las 9.30 de la mañana, para tomar el vuelo de las 11.15 de Binter Canarias. Ya en el aeropuerto de Las Palmas había varios individuos de la seguridad marroquí (los conocían tanto Aminetu, como otros saharauis que volaban en el mismo avión, como algunos compañeros de la Asoc. Canaria de Amistad con el Pueblo Saharaui que habían ido a despedirla al aeropuerto), que nos estuvieron observando, mientras grabábamos a Aminettu en el aeropuerto. Por precaución, dejamos la cinta que habíamos grabado en el aeropuerto a uno de los que habían acudido a despedir a Aminetu, con la idea de recogerla a la vuelta.
En el avión seguimos grabando, y entrevistando a Aminetu, y quedamos con la azafata en que le dejaríamos la cinta para que se la llevaran de vuelta a El Aaiun. La azafata lo comentó con el comandante, y éste estuvo de acuerdo en llevarsela a Las Palmas.
Cuando el avión aterrizó, le dije al cámara que se quedara en el avión, grabando la salida de Aminetu, mientras bajaba por la escalera y se dirigía por la pista hacia la terminal. Yo salí antes, y esperé a Aminetu en la terminal, con la idea de poder registrar el momento de la detención.
En el momento en el que Pedro Guillén estaba en la escalerilla del avión, con la cámara en la mano, se le acercaron dos agentes de la Gendarmerie Royal corriendo, y gritándole que no se podía grabar. Se lo llevaron a un despacho de la policía. Yo mientras tanto, entré a la terminal, detrás de Aminetu, y en la cola de los pasaportes vi como un agente de paisano la apartaba de la fila, y le pedía el pasaporte y el formulario de entrada. Vi que la llevaban hacia un despacho, y que la dejaban sentada en una banqueta delante de la puerta, con varios individuos de paisano a su alrededor.
Yo hice los trámites de pasaporte y de aduana, y me dejaron salir.
Cuando estaba en el hall del aeropuerto, empecé a buscar al cámara, pero no habia salido. En ese momento se me acercaron dos policias de paisano, me preguntaron si yo venia con un cámara, y me pidieron que les acompañara.
Cuando llegué al despacho en el que estaba el cámara, lo encontré rodeado de decenas de agentes de diferentes cuerpos, muchos de ellos de paisano. Nos pusieron junto a la pared, y un grupo de 10-15 fotógrafos y cámaras empezaron a grabarnos y fotografiarnos desde todos los ángulos, de frente, de perfil, etc… Después nos pasaron a una sala, con una mesa, y un oficial (debia ser coronel) de la Gendarmerie Royal empezó a preguntarnos. Habían confiscado ya la cinta que el operador llevaba en la cámara, y habían visto que habíamos grabado a Aminetu. Yo lo reconocí desde el primer momento. Nos empezaron a acusar de estar grabando instalaciones de seguridad del aeropuerto (efectivamente, en el fondo de la imagen de Aminetu caminando por la pista se veían los edificios de la terminal, y a los gendarmes de vigilancia), de no tener permiso de rodaje (es cierto que era así, no lo teníamos ni lo habíamos pedido).
Durante unas 7 horas nos estuvieron interrogando, preguntando quien nos pagaba, para que organización trabajábamos, desde cuando conocíamos a la ‘independentista – separatista’ Aminetu, qué otros contactos habíamos tenido con organizaciones que apoyan a Aminetu… y en un momento dado empezaron a preguntar por ‘la otra cinta’ que habíamos grabado. Les dijimos que no había otra cinta, que las demás que teníamos eran vírgenes, etc… y en un momento dado nos separaron, y nos interrogaron por separado. El cámara dijo que quizas se le había caido una cinta en el avión, y entonces mandaron llamar al Comandante de Binter, que aún no había salido para el vuelo de vuelta, que finalmente entregó la cinta.
Por esa sala fueron pasando agentes de todos los cuerpos, policiales, militares, de paisano, entraban y salían, nos fotografiaban, grababan el contenido de nuestras cintas… En un momento dado apareció un tipo, ante el que todos los demás se cuadraron, y me dijo que habíamos cometido una infracción muy grave, y que nos tendrían que decomisar todo el equipo, incluidos los telefonos móviles y ordenador. (Luego supe que era el Wali, el Prefecto de Policía de El Aaiun).
En varias ocasiones pregunté en que condición estaba, porque si era como detenido deberíán avisar a mi embajada. Ellos siempre contestaron que no estaba detenido, pero que no podía irme hasta que no terminaran las diligencias que estaban haciendo, y que deberían entregar al juez.
En varias ocasiones les pregunté por Aminetu, y me decían que no estaban autorizados a decirme nada.
En todo el tiempo que estuvimos ‘retenidos’ (desde las 12.30 hasta las 19.30) no nos dieron nada de comer o beber, salvo una botella de agua que nos entregaron sobre las 18.00.
Finalmente, sobre las 18.30, dejaron entrar a un representante de la Embajada española, creo que con rango consular, que nos facilitó un traductor para leer la declaración, que con algunas matizaciones, finalmente firmamos. No sé si ahora nos llamarán a declarar del juzgado de El Aaiun.
La policía nos buscó plazas en un vuelo que regresaba a Las Palmas a las 21.00, nos devolvieron la cámara, nos confiscaron las cintas, y nos dejaron ir.
El consul me contó que durante todo el dia, hasta más o menos las 17.00, el aeropuerto había estado acordonado por la policía, y que a él no le habían dejado pasar. Tampoco conseguía conectar con ninguno de los teléfonos que él tenía de la policía del aeropuerto.
Yo quiero ahora solicitar la devolución de las cintas, y que me concedan un permiso de rodaje para grabar en El Aaiun.
Hasta aquí el relato.