(PD/EFE).- Los conductores que circulen por los accesos a Barcelona y por la primera corona metropolitana no pueden rebasar desde hoy los 80 kilómetros por hora debido a una nueva medida de la Generalitat de Cataluña que pretende reducir la polución del aire.
A partir de esta mañana la nueva limitación de la velocidad es efectiva a través de las señales de tráfico, de los paneles luminosos y de los controles dinámicos de velocidad que efectuarán los Mossos d’Esquadra.
Hasta el 1 de enero, los conductores que superen ese nuevo límite no serán multados pero sí recibirán una notificación en casa. Con la entrada del nuevo año, la medida entrará en vigor con todas sus consecuencias para los infractores.
En total quedarán afectados unos 80 kilómetros de carreteras que discurren por 16 municipios del área metropolitana de Barcelona. En concreto, las vías en las que se aplicará la nueva medida son la C-31, C-32, B-23, AP-2, A-2, B-10, C-16, C-58 y la C-17.
Aire más limpio
La medida, según el director de Tráfico de Cataluña, Josep Pérez Moya, «no es un invento de la Generalitat» y se aplica para reducir los «pésimos» indicadores del aires.
El Departamento de Medio Ambiente del Gobierno catalán confía en que se reduzca en un 17% la polución, un elevado porcentaje si se tiene en cuenta de que en estos momentos la velocidad media en los accesos a Barcelona es de 88 km/h, sólo 8 km/h superior a los que marca la nueva norma.
Las autoridades de Tráfico han explicado que la reducción de la emisión de partículas en suspensión que conllevará la reducción de la velocidad evitará la muerte de 1.200 personas al año por afecciones cardiorrespiratorias.
Pérez Moya también considera que la fluidez del tráfico mejorará porque «a menos velocidad, la distancia de seguridad entre los coches puede ser menor, por lo que se aprovecha mejor la vía».
Además, según Tráfico, la reducción de la velocidad vendrá aparejada de un descenso de la siniestralidad en las carreteras, ya que, por ejemplo, en los países donde ya se han aplicado este tipo de medidas la mortalidad ha descendido entre un 30 y un 50%.
