Un ‘pollo’ real. Ese ha sido el de la la tiene Victoria Federia.
Ha sido cumplir los 18 años y protagonizar su primer altercado público. Este miércoles, tras asistir a un desfile, la hija de la infanta Elena fue a la inauguración de un restaurante en pleno centro de Madrid junto a un grupo de amigos. La noche acabó con gritos, llantos y un triste regreso a casa.
Eran las 23 horas cuando Victoria Federica llegó a Sin Sombrero, un local situado en el Paseo de la Castellana de Madrid. Charlaba con un grupo de amigos cuando comenzó a discutir acaloradamente con uno de ellos que, al parecer, guardaba cierto parecido físico con el torero Gonzalo Caballero, con el que fue relacionada sentimentalmente hace unos meses.
La nieta de los eméritos salió del local para tomar el aire y calmarse y aprovechó para realizar una llamada de teléfono. A su regreso al interior del restaurante, tomó asiento en una mesa de espaldas a sus amigos, donde rompió a llorar. Dos horas después, algo más calmada, abandonó el lugar, tal y como desvela Okdiario.
Hasta ahora, Victoria Federica era considerada una de las nietas reales más tranquilas. De carácter tímido y afable, ha sido una niña muy estudiosa, amante de la música clásica y de los caballos, muy familiar y querida en su círculo.
En los últimos meses, Vic acapara titulares por su estrecha amistad con algunos de los toreros más populares del momento (como Gonzalo Caballero o el peruano Roca Rey), su particular estilo para vestir o su cada vez más abultada vida social.