(PD).- Un total de 28 personas, entre ellas siete menores de edad, han resultado heridas en la explosión producida en un bloque de viviendas de tres plantas situado en la zona de ca n’Espinós, de la localidad barcelonesa de Gavà. Según la consejera de Salud de la Generalitat, Marina Geli, «peligra la vida» de 18 de los 28 heridos, ya que sufren quemaduras en más del 60% de su cuerpo, y en algunos casos en más del 90.
13 de los heridos están ingresados en el Hospital de la Vall d’Hebron de Barcelona, donde han ido llegando los casos más graves. Se trata de siete adultos (seis muy graves y uno grave) y seis niños (cuatro con pronóstico muy grave, uno grave y otro leve).
El Hospital Clínic, por su parte, acoge cuatro pacientes más en cuidados intensivos. El Hospital de Bellvitge acoge seis heridos más, tres en la unidad de cuidados intensivos que, además de las quemadas, presentan politraumatismos, y otros tres en reconocimiento de urgencias.
El hospital infantil Sant Joan de Déu acoge a otro menor de edad, pendiente del traslado de Vall d’Hebron, mientras que tres de los cuatro ingresados en el hospital de Viladecans han sido dados de alta. El otro herido sigue ingresado en estado leve, aquejado de intoxicación por humo y contusiones.
El siniestro se produjo a las tres de la madrugada
Tras recibirse el aviso, a las 3.06 de la madrugada, 23 dotaciones de bomberos acudieron a la zona para sofocar el fuego, que afectó fundamentalmente a los pisos bajos del edificio, donde según las primeras hipótesis se habría producido la deflagración.
19 de los 28 afectados por la explosión fueron evacuados antes de la llegada de los bomberos, algunos por sus propios medios o ayudados por vecinos de la zona. Aun así, el consejero de Interior de la Generalitat, Joan Saura, ha defendido la labor de los bomberos y ha asegurado que la primera dotación llegó ocho minutos después del aviso, a las 3.14 horas.
Se da la circunstancia de que un coche de la policía local patrullaba por la zona en el momento de los hechos, ya que habían recibido un aviso a las 2.47 horas de una fuga de agua en la zona, que no se ha relacionado con la explosión por el momento, según ha aclarado Saura.
Los bomberos permanecen en la zona para intentar acceder al interior de los pisos que se han quemado e inspeccionarlos, especialmente en la planta baja, en unos trabajos que durarán horas, según las mismas fuentes. En estos momentos no ha aparecido ninguna víctima más en el interior del inmueble, según han informado las mismas fuentes, y los pisos superiores ya han sido revisados.
