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El desnudo tiene su arte.
La pintura ha permitido recrear la desnudez vetada en la vida real, proscrita para los humanos de carne y hueso, y ha sido capaz de despertar el deseo y sentimientos sublimes en espectadores atenazados en su intimidad.
Como la mejor literatura, los cuadros grandiosos te arrastran a mundos ideales, fantasiosos, pero materializados ante tus ojos como puertas abiertas a la escapatoria.
Dicho esto y volviendo a lo cotidiano, hay que subrayar que a partir de ciertas edades y algunos pesos y volúmenes, desnudarse en público deja de ser algo artístico o lujurioso, para convertirse en un acto de humildad.
CALORES VERANIEGOS
- Hacía un calor insoportable.
El tipo sale del baño mojado y en cueros vivos y le dice muy chulo a su mujer:
-Gordita, hace mucho calor y tengo que cortar el césped ¿Qué crees tú que dirán los vecinos si salgo así, en pelotas?
La mujer lo mira de muy seria y responde:
– Que me casé contigo por tu dinero.