El  articulo fue escrito por IOHANAN TZOREF- YOEL GOZANSKY y publicado por INSS (TEL AVIV).

Como parte del impulso de acuerdos y arreglos entre partidos y países de Medio Oriente, existe un acercamiento en las relaciones entre Arabia Saudita y el movimiento Hamás, que se vio reflejado en la visita del máximo responsable de Hamás al reino y la liberación de prisioneros de la organización que estaban encarcelados allí. En principio, el acercamiento entre Arabia Saudita y Hamás no debería perjudicar el proceso de normalización entre los países de la región e Israel, siempre que se perciba a Israel como un actor democrático estable que contribuye a la estabilidad regional.

La cúpula de Hamas, incluido el presidente del Buró Político, Ismail Haniya, visitó Arabia Saudita en abril de 2023. Haniya estuvo acompañado por Khaled Mashal y Musa Abu Marzouk, los ex presidentes de la organización, que continúan ocupando altos cargos en ella, así como por Khalil Haya, adjunto de Yahya, Snuar y jefe de la oficina de información de la organización.

La visita despertó un gran interés debido a la desconexión desde 2007 entre la familia real saudí y Hamas y las tensiones que han acompañado su relación a lo largo de los años transcurridos. Hamas es visto como una facción militante de la Hermandad Musulmana que mantiene lazos con Irán, el principal rival del reino. Ya en 2014, los Hermanos Musulmanes fueron incluidos en la lista de organizaciones terroristas en Arabia Saudita y sus operativos, incluido Hamas, fueron encarcelados. En 2021, Riyadh dictó severas sentencias de prisión de hasta 22 años a 64 miembros de alto rango de la organización y sus operativos por cargos de lavado de dinero y apoyo al brazo militar de la organización. Entre los condenados a prisión prolongada (15 años) se encontraba el jefe de la delegación de Hamas en el reino, el Dr. Muhammad al-Khudri, quien fue liberado en octubre de 2022 y falleció, insinuó Khaled Mashal en uno de los momentos de frustración del Occidente saudí. que los arrestos tenían la intención de complacer a Israel, en el contexto de su acercamiento al reino.

La última visita de la delegación de Hamas a Arabia Saudita tuvo lugar en 2015 y tenía la intención formal de observar la Mitzvah Amra, una peregrinación que no se lleva a cabo en la festividad del sacrificio, pero incluyó reuniones con el príncipe heredero Muhammad bin Salman, el Ministro de Defensa y el jefe de la inteligencia saudita. Sus resultados no defraudaron a los miembros de Hamás, que esperaban un cambio de política hacia la organización, especialmente en el tema de los presos. Según los invitados, la presente visita también tenía como objetivo cumplir con la Mitzvá del Amrah. Sin embargo, hasta donde se sabe, antes del regreso de la delegación de Hamas a Doha, no hubo reuniones durante la visita entre esta y funcionarios saudíes (o sí tuvieron lugar pero no se hicieron públicas). Toda la información sobre este asunto provino de fuentes cercanas a Hamás.

El interés suscitado por la visita se enmarca en la tendencia generalizada de descongelamiento, evidente recientemente, en las relaciones entre los países árabes y entre éstos y Turquía, Irán, Siria y las organizaciones cercanas a ellos. Al mismo tiempo que la visita de la delegación de Hamas, y aparentemente para transmitir un enfoque equilibrado hacia la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, el presidente de la Autoridad Palestina, también fue invitado a una comida iftar en Riyadh mientras la delegación de Hamas visitaba el reino. Incluso en este acercamiento a la Autoridad Palestina hay una especie de cambio, ya que Arabia Saudita ha mostrado frialdad hacia Abbas en los últimos años e incluso ha congelado la ayuda a la Autoridad Palestina de vez en cuando debido a la insatisfacción con la, en su opinión, postura rígida de Abbas. hacia el plan Trump y por un interés en influir en la identidad de su sucesor. La proximidad de las visitas incluso hizo pensar que Riyadh pudo haber buscado fortalecer su influencia en la Franja de Gaza y quizás promover la reconciliación entre Hamas y la Autoridad Palestina, es posible que basado en el acuerdo de reconciliación entre Hamas y Fatah de 2007 – el «Acuerdo de La Meca» – que no se implementará. En cualquier caso, para la visita de Abbas a Riyadh se dio una expresión pública.

En 2021, Hamas comenzó a implementar una nueva estrategia, cuyo propósito es socavar a la Autoridad Palestina desde casa y fortalecer la posición de la organización como factor central tanto en la ecuación israelí-palestina como actor político relevante en la región. El objetivo es obligar a Israel y a todas las partes relevantes a reconocer a Hamas como un partido digno de un discurso pan-palestino. Después de la operación Wall Guard en mayo de 2021, los líderes de la organización agradecieron públicamente a Irán por su amplia asistencia al propio Hamas y a la «resistencia» palestina, financiando actividades y proporcionando una gran cantidad de conocimientos y equipos. El discurso grabado del presidente de Irán, Ebrahim Raisi, transmitido en la Franja de Gaza el «Día de Jerusalén» en abril de 2023, así como el discurso del comandante de la Fuerza Quds transmitido el «Día de Jerusalén» el año anterior, expresó la gratitud de Hamas a Irán.

La visita de los líderes de Hamas a Arabia Saudita y la liberación de los prisioneros de Hamas que estuvieron recluidos en el reino en los meses anteriores, así como las liberaciones posteriores a la visita, deben verse en el contexto de los acontecimientos regionales, la mayoría de los cuales son dirigidos por el reino. Musa Abu Marzouk, responsable de las relaciones exteriores de Hamas, intentó en vísperas de la visita a Riad corregir la impresión creada por el lanzamiento de cohetes en territorio israelí en abril por parte de la organización del Líbano y la Franja de Gaza y la escalada de ataques israelíes -Tensión palestina en torno a la Mezquita Al-Aqsa durante el Ramadán, que Hamás se ha convertido en parte de un eje. La resistencia” liderada por Irán. Aclaró que Hamás era y sigue siendo una organización independiente, que no pertenece a un eje ni a otro. El mensaje tenía la intención de calmar la conocida sensibilidad saudita en este contexto.

¿Se está desarrollando una nueva política saudita y Hamas es el beneficiario de esto? Y si es así, ¿cómo entender la visita paralela de Abbas a Riad, donde fue recibido con el respeto reservado a los jefes de Estado? Parece que la visita de la delegación de Hamás fue un pilar más de la nueva política que está llevando a cabo Arabia Saudí y cuyo fin es rebajar las tensiones y la hostilidad entre ésta y los países de la región, en favor de impulsar los grandes proyectos y el impulso de seducción que ha comenzado. Una de las manifestaciones de esta política es la mitigación del antagonismo hacia el Islam político. Las relaciones con Hamás, que forma parte de esta corriente y está muy cerca de Irán, forman parte de esta tendencia.

Al mismo tiempo, la invitación de Abbas a una visita paralela pretende señalar a todas las partes interesadas, incluido Israel, que no se trata de un giro político sino de la búsqueda del equilibrio en el contexto de un esfuerzo por reducir los daños a la luz de cambios prioridades regionales e internacionales. Arabia Saudí, que invitó a Siria a participar en la cumbre árabe prevista para el 19 de mayo en Riad, tras trabajar para devolverla a la Liga Árabe, también busca volver y asumir posiciones clave de liderazgo regional y reunir al mundo árabe a su alrededor. , utilizando sus herramientas tradicionales de influencia -financiamiento y mediación- y abandonando los intentos infructuosos de cambiar la realidad regional por medios militares.

Desde el punto de vista de Israel y en gran medida también desde el punto de vista de los Estados Unidos, el mensaje que surge de estos acontecimientos es que, en el contexto de la formación de nuevas dinámicas y equilibrios de poder en la región, que despiertan expectativas de toma de posición e incluso de involucramiento de actores de la región, será muy difícil mantener en el tiempo el estancamiento en curso en torno al tema palestino. Además, el acercamiento entre Arabia Saudita y Hamas también puede tener consecuencias positivas, ya que el Reino puede tener una influencia creciente y restrictiva en la organización, posiblemente a expensas de las relaciones entre esta e Irán.

Y, sin embargo, aunque los movimientos de reconciliación regional que Arabia Saudita tomó recientemente no tenían la intención de detener la tendencia de normalización entre Israel y Arabia Saudita, parece que esto se ha ralentizado en gran medida. La composición del actual gobierno israelí plantea interrogantes en la región (así como en el ámbito internacional) por la erosión de la imagen de Israel como democracia estable y principal aliado de Estados Unidos en la región, así como por el debilitamiento de la imagen del primer ministro Benjamin Netanyahu como un líder fuerte. En tal realidad, a Arabia Saudita le resulta difícil ver las relaciones con Israel como un sustituto de los intentos de calmar las tensiones con sus rivales en la región y especialmente con Irán. Después de todo, la estabilidad gubernamental fue a los ojos de los vecinos de Israel una de las fuentes de su fortaleza y una de las razones que motivaron el acercamiento a la misma.

P.D: Acostumbro traer a los lectores articulos publicados por el INSS por la calidad de estos.

Pero, como ocurre en este caso, en muchas ocasiones tengo puntos de discordancia con lo escrito….porque, a mi parecer, quienes escriben otorgan lo que en Hebreo denominamos «Impuesto labial» a la ideologia  que caracteriza al INSS y a la Universidad de TEL AVIV…o porque son «reclutados» para ser parte  del Instituto por su cercania ideologica con el, o porque «hacen lo que les dicen hacer».

Por ello, un analisis que, a mi punto de vista es generalmente objetivo, tiende asiduamente en sus ultimas frases a criticar al actual Gobierno de ISRAEL…y a convertirlo en el punto de origen de «todos los males» que pueden ocurrir.