La situación en Ucrania tiene muy mala pinta.
Tras la exponencial escalada de las tensiones en las relaciones diplomáticas entre Ucrania y Rusia, Vladímir Putin decidió salir públicamente para dirigirse no solo a los rusos, sino también a ucranianos, y países miembros de la UE y la OTAN, bajo el pretexto de la legítima defensa de aquellos rusos que se encuentran al este ucraniano.
El presidente de la Federación Rusa hacía público un comunicado, el día 24 de febrero de 2022, en el que dejaba clara la decisión de llevar a cabo una operación militar especial como respuesta a las condenas de la OTAN y UE del comportamiento del Kremlin las recientes semanas. Alega que esta operación solo se trata de una respuesta urgente a las circunstancias, de acuerdo a sus propias palabras, publicadas vía Twitter por el diario El País:
«Las circunstancias requieren acciones firmes e inmediatas de nuestra parte. Las repúblicas populares del Donbás solicitaron ayuda a Rusia.»
Tras estas declaraciones, el presidente ruso continuó amparando sus nuevas operaciones especiales en el artículo 51, parte 7 de la carta de las Naciones Unidas, mediante la cual y por la petición de auxilio de un país y con la intención de ayudar a la población prorrusa, podría atacar Ucrania para liberar a las Repúblicas Populares, de reciente nacimiento, del ‘pesado yugo ucraniano’.
«En este sentido, de acuerdo con el artículo 51, parte 7 de la carta de las Naciones Unidas, con el consentimiento de la Federación de Rusia y de acuerdo con el ratificado acuerdo de amistad y ayuda mutua del 22 de febrero de este año con la República Popular de Donetsk y la República Popular de Luhansk, decidí llevar a cabo una operación militar especial, cuyo objetivo es la protección de las personas que durante ocho años, sufren abusos y genocidios por parte del régimen de Kiev».
? Putin amenaza a la UE y la OTAN tras su ataque a Ucrania: «Quienquiera que intente detenernos y crear más amenazas para nuestro país debe saber que la respuesta será inmediata y tendrá unas consecuencias que nunca han enfrentado en su historia» https://t.co/pcs8sa2ym0 pic.twitter.com/NgqQsTdKkD
— EL PAÍS (@el_pais) February 24, 2022
En sus declaraciones, el presidente del Kremlin aseguró que hay un acuerdo de amistad y ayuda con las Repúblicas Populares Donetsk y Luhansk, y que no permitirá que sigan sufriendo por el régimen de Volodímir Zelenski, al que, en más de una ocasión, ha acusado de ser un «nazi» y de cumplir con los deseos y pretensiones ideológicas de las élites neofascistas.
«Nos esforzaremos por desmilitarizar y ‘desnazificar’ Ucrania. Y también por llevar ante la justicia a aquellos que cometieron numerosos crímenes sangrientos contra civiles, incluidos ciudadanos de Rusia»
Uno de los puntos que más preocupa a la comunidad internacional, por la cuenta que le trae, es la amenaza de atacar a «quienquiera que intente detenernos y crear más amenazas». Por ahora hay más de una decena de ciudades ucranianas que se encuentran bajo amenaza militar rusa, y ya ascienden a 40 las víctimas mortales de este enfrentamiento, además de darse cortes en el suministro eléctrico en muchas de las ciudades cercanas a Kiev, la amenaza a la OTAN y UE concluyó de la siguiente manera:
«La respuesta de Rusia será inmediata y los llevará a tales consecuencias, que nunca han enfrentado en su historia. Estamos listos para cualquier resultado»
Preocupa cuál pueda ser la respuesta de la OTAN y UE que seguro no se van a quedar con los brazos cruzados, y un movimiento en falso por parte del Gobierno de Ucrania puede terminar por arrastrar a toda Europa y países de la OTAN a una guerra contra Rusia, que cuenta también con sus propios aliados de gran envergadura, entre los que destaca la República China. Sobre las capacidades de la Rusia moderna, el presidente del Kremlin opina:
«En lo que respecta a la esfera militar, la Rusia moderna es una de las potencias nucleares más fuertes ahora, incluso después de la desintegración de la URSS y la pérdida de una parte considerable del potencial nuclear. Además, tiene ciertas ventajas en la línea de las armas de última generación. En este sentido, nadie debería tener dudas de que un ataque directo contra Rusia conducirá a una derrota y a consecuencias devastadoras para un potencial agresor».