El Conservatorio de Jaén

En Jaén y su provincia, cualquier “obra” del tipo que sea, pareciera siempre que se trata de “obra faraónica”, y que por tanto, aparte del dinero a emplear, el tiempo de realización “siempre se eterniza”; ocurre igual que “en los papeleos oficiales y municipales”; todo son poner obstáculos, inconvenientes y cuando no imposibles; aquí más que servidores públicos, lo que hay son “obstaculizadores del progreso”.
CONSERVATORIO SUPERIOR DE MÚSICA DE JAÉN: Convencido de la importancia del mismo en una capital y provincia, que aportaba muchísimos alumnos de música, que tenían que desplazarse a Granada, Córdoba y otras capitales españolas, para realizar y terminar sus estudios. Convencido igualmente que en LA MÚSICA (adrede con mayúsculas) es uno de los campos en que el alma humana y sus manos (pies también pero menos) es el de los mejores campos para la realización de ese ser, que aparte de bruto y animal, lo es igualmente en grado espiritual y del que ni sabemos su profundidad o capacidad. Convencido igualmente que por mucho que avance la brutal tecnología que “hoy lo destruye” en gran manera; en LA MÚSICA, la mayor y máxima belleza, siempre serán nacidas en esa espiritualidad y capacidad humanas; me preocupé y preocupa, que en mi ciudad natal, exista siempre un centro de enseñanza de LA MÚSICA; equiparable a cualquier otro que pueda existir en cualquier otro lugar del mundo; y por ello escribí hace ya bastante tiempo, un artículo que publicado aquí (no recuerdo la fecha) dio sus resultados iniciales por cuanto relato.
Publicado aquel artículo (creo fue en marzo de hace 11 años, puesto que he escrito varios) y en uno de ellos, dije lo que sigue: “Aquí en Jaén (y ahora hablo en ámbito provincial) todos los políticos han prometido “el oro y el moro”, sin que apenas hayamos visto “ni al uno ni al otro”; por tanto, ya es hora de que Jaén tenga un primer conservatorio de música de la máxima categoría; a ello le da derecho la población provincial. Pero es que no hay que conformarse sólo con ello; es que hay que pedir conservatorios de música para cada población o comarca que cuente con una estimación de alumnado y posibles alumnos, que justifique ello; e incluso que esos conservatorios sean escalonados y que en un futuro más o menos hubiese, otros dos superiores en la provincia, situados en lugares o áreas, que como la que cito de Jaén, completen habitantes de forma parecida, puesto que lo que indico para Jaén y alrededores, sólo es un tercio de la población provincial”.
Afortunadamente respondió un político, en aquellas fechas “consagrado a Jaén” (luego las ambiciones de panza y bolsillo incluso lo llevaron a Madrid) y el que parándome en el semáforo de “Puerta Barrera”, donde coincidimos, me dijo, más o menos lo que sigue… “Me parece muy buena idea la suya y voy a interesarme por ella en Sevilla para que sea una realidad”; y lo fue, puesto que este hombre (Sr. Fernández de Moya) a la sazón también parlamentario en Sevilla; trabajó lo necesario y el conservatorio “superior” fue una realidad; pero “una realidad al estilo de este siempre mendicante Jaén”; o sea mal dotado, en todo lo que debiera ser un centro de la importancia y efectividad que debe ser lo que más que un conservatorio, debe ser “un templo superior para LA MÚSICA, siquiera por honrar al Maestro Pitágoras y su música de las estrellas ”.
Y han pasado más de dos o tres lustros “de aquellos artículos”; y aún el conservatorio musical, sigue en proyecto y Jaén esperando y pronunciando siempre el maldito y esclavo “ea jaenero y jiennense”; y los políticos, tocándose los cojones y también la panza y el bolsillo, por cuanto vengo diciendo hace ya más de cuarenta años.
Ya y en aquellos tiempos, escribí un cuento, que está en mi libro “Cuentos y relatos”, en el que en el 2.038 se inaugura en Jaén, una edificación a tenor con lo que yo entonces imaginé, sería un marco maravilloso para el teatro y la música, que estoy seguro que nunca será edificado; pero también en aquel relato, anunciaba “una orquesta sinfónica para Jaén” (que ni había intenciones de ello) y afortunadamente ya hay varias en la provincia; como también soñé “una sinfonía digna de los antepasados e historia de este viejísimo territorio, hoy conocido como Jaén”; la que estoy seguro que “algún capacitado de la tierra, le dará sentimiento y voz musical, en el tiempo y el espacio”.
Yo y mientras siga en mi muy buena y aún magnífica e, “inválida salud octogenaria”; seguiré “dando la lata”, puesto que mis neuronas y mis manos, siguen eficazmente funcionando y no solo no envejecieron, sino que creo se renuevan cada día.

Antonio García Fuentes
(Escritor y filósofo)
www.jaen-ciudad.es (aquí mucho más) y
http://www.bubok.es/autores/GarciaFuentes