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Ocurría en los informativos de la primera cadena de Atresmedia de este largo fin de semana de 7 y 8 de diciembre de 2019, que en Antena 3 dirige y presenta Matías Prats junto a Mónica Carrillo. En un primer momento la enorme pifia, por lo menos le vamos a achacar desde Periodista Digital falta de sensibilidad a los editores, pasaba desapercibida, pero poco a poco las críticas iban cogiendo fuerza gracias a las redes sociales.
A saber, resulta que Antena 3 daba cuenta de un suceso de esos que gustan mucho porque tienen final feliz, porque un héroe es el protagonista y porque son una mancha de humanidad en este cruel mundo de malas noticias deshumanizadas…
Los informativos de Antena 3 se hacían eco de que los vecinos de la localidad alicantina de Dénia buscan desde el pasado viernes a un joven «héroe» de nacionalidad senegalesa que el pasado viernes salvó a un hombre con movilidad reducida en el incendio de su vivienda en esta población del norte de Alicante.
Pero la noticia quedaba eclipsada por el titular elegido por los responsables de los informativos que sin inmutarse rotulaban: “Un inmigrante salva a un hombre”. Y, claro está, esto provocaba las típicas reacciones en Twitter:
«Aja, los inmigrantes según A3 no son personas … el que no es persona es quien haya aprobado este titular de mierda». «De qué especie seremos…». «Hombre, si también queremos igualar ahora a los inmigrantes con personas, malditos progres. (Ironía modo on)». «Antena3 noticias enseñando otra vez más la patita».
Y muchos comentarios más poniendo a caer de un burro a los de Atresmedia y dejando a la altura del betún la imagen de un histórico referente como es Matías Prats.
Olvidando la polémica, el concejal de Seguridad de ese municipio alicantino, Javier Scotto, ha relatado que el incendio ocurrió el pasado día 6 a las 12.24 horas en el número 7 de la calle Port, cuando se desencadenó un fuego en la planta baja de una vivienda con una altura cuando en el primer piso había un morador de 37 años con movilidad reducida por un problema en las piernas.
La víctima pidió auxilio a gritos y unos vecinos intentaron acceder a la primera planta aunque sin éxito, y en ese momento apareció el desconocido senegalés y, sin dudarlo, trepó por la fachada hasta el balcón de la primera altura. Entonces, entró dentro de la casa y saló con la víctima a los hombros para volver a descender en esta ocasión ya con la ayuda de unas escaleras que acababan de colocar unos vecinos.
Tras bajarlo, el senegalés entró en una vivienda próxima de una mujer para lavarse las manos y posteriormente, sin más, se fue del lugar sin que se sepa dónde.
