El popular Carlos Mazón tendrá que pactar con VOX

Encuestas: el PP ganará en la Comunidad Valenciana y Mazón sustituirá a Puig como presidente de la Generalitat

Los populares se meriendan en bloque el voto de Ciudadanos y con los seguidores de Santiago Abascal llegan a la mayoría absoluta

Encuestas: el PP ganará en la Comunidad Valenciana y Mazón sustituirá a Puig como presidente de la Generalitat
Ximo Puig (PSOE) y Carlos Mazón (PP), con el fondo de las encuestas en la Comunidad Valenciana. PD

Son sondeos y ya se sabe que el único que de verdad cuenta es el del día del voto, pero podría haber elecciones en cualquier momento.

Basta que alguien de el disparo de salida y en Andalucía suenen tambores electorales.

Sobre el papel, en la Comunidad Valenciana no toca hasta abril de 2023, pero si el tramposo Pedro Sánchez se ve obligado a ir a las urnas, nadie duda de que Ximo Puig también lo haga, intentando repetir la jugada de 2019

La diferencia y basta echar un vistazo a los sondeos, es que ni Puig ni Sánchez son los mismos ahora, lastrados por el desgaste de su pésima gestión.

Los gurús de La Moncloa consideraban hasta haca no mucho que la Comunidad Valenciana les podría servir de contrapeso al fracaso que se anticipa en Andalucía, pero se les está ensombreciendo el panorama.

A nadie se le escapa que –tras la debacle en Madrid del pasado 4 de mayo, cuando Isabel Díaz Ayuso aplanó a la izquierda-– encadenar tropiezos electorales seguidos consolidaría la tendencia perdedora de la marca PSOE.

La última encuesta de NC Report, publicada este 29 de noviembre de 2021 por La Razón, es un jarro de agua fría para Sánchez y sus compinches.

Si hoy hubiera elecciones, los populares adelantarían al PSOE como el partido más votado gracias a la absorción del grueso del cuerpo electoral de Ciudadanos y relanzarían al bloque de la derecha hasta un empate técnico con el de la izquierda. En concreto, el PP obtendría el 29,3% de los votos y entre 30 y 31 escaños, lo que le permitiría arrebatar la Generalitat a Ximo Puig.

Para ello, sería imprescindible un pacto con VOX y con los restos de Ciudadanos, sumando el 50,4% de los votos.

El impulso de los populares –que crecen entre 10 y 11 escaños– se produce, además, con un candidato recién llegado, Carlos Mazón, que fue elegido el pasado mes de junio y a quien el adelanto electoral le impediría seguir avanzando en su estrategia de consolidación y conocimiento ciudadano.

La formación de Santiago Abascal también sube (entre cinco y seis diputados) y se alza como tercera fuerza adelantando a Compromís y Ciudadanos con el 15,9% de los votos y entre 15 y 16 escaños.

Ciudadanos, que en 2019 se quedó a un escaño y 38.000 votos del PP, cae ahora estrepitosamente hasta la última fuerza, pero sus cuatro escaños y el 5,2% de los apoyos serán imprescindibles para decantar la Generalitat del lado de Mazón.

En ese magma que forman izquierda, extrema izquierda y sarrapastrosos, el PSOE sigue siendo la fuerza mayoritaria con el 24,1% de los votos y entre 26 y 27 escaños.

Puig apenas pierde respaldo con respecto a 2019, a lo sumo un escaño y 53.600 votos, pero el pacto del Botánico registra un ligero retroceso que le colocaría al filo de la mayoría absoluta (46,3%) y le haría perder la Generalitat.

La falta de pujanza de la izquierda se observa también en los socios, que son quienes, en mayor medida, lastran al bloque.

Compromís no rentabiliza la alineación de Mónica Oltra con Yolanda Díaz y se mantendría en un 15% de los apoyos, con entre 16 y 17 escaños, hasta dos menos que los que obtuvo en 2019.

Se desconoce si Oltra encabezaría de nuevo la candidatura o se integraría en el proyecto de la vicepresidenta. Un adelanto electoral frustraría el salto a la arena nacional y contribuiría a despejar el horizonte.

Unidas Podemos perdería también un representante y se quedaría con siete parlamentarios y el 7,2% de los votos.

El adelanto electoral contribuiría a desincentivar la movilización. La coincidencia en 2019 con las generales colocó la participación en un 73,7 por ciento. Ahora, sin embargo, bajaría más de seis puntos y se quedaría en el 67,6%.

TRASVASES DE VOTOS

El transvase de voto resulta significativo para explicar el cambio de tendencia y es descalabro del bloque de izquierdas.

Ximo Puig cede más votos a PP (5,3%), VOX (3,9%) y Ciudadanos (3,4%) de lo que lo hace en favor de Compromís (2,5%) y Unidas Podemos (2,2%).

La mayor fuga de votos de los socialistas se produce hacia la abstención (10,4%).

 

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