El régimen de Nicolás Maduro se está frotando las manos con la nefasta oferta que Pedro Sánchez le hizo al presidente de Colombia, Gustavo Petro.
El presidente del Gobierno se puso a disposición del guerrillero para apadrinar las nuevas negociaciones de paz entre el Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). Un planteamiento que podrá acabar con el dictador venezolano paseándose por los pasillos de La Moncloa.
Tras conocer el ofrecimiento de Sánchez, desde Unidas Podemos comenzaron a movilizar la maquinaria pesada política para traer al líder bolivariano a Madrid.
Según publica ‘El Debate’, Yolanda Díaz puso la tarea en manos del secretario general del PCE, Enrique Santiago.
No se trata de una jugada pensada a la ligera, ya que el exsecretario de Estado de la Agenda 2030 fue el asesor jurídico de las FARC en el anterior proceso de paz (que culminó en un acuerdo entre el entonces presidente Juan Manuel Santos y el guerrillero Timochenko que el pueblo colombiano rechazó rotundamente en referéndum).
El líder del Partido Comunista Español no ha perdido el tiempo y ya advirtió a Sánchez de que el dictador Maduro debe tener un papel protagonista en el proceso de paz con el ELN.
“España no debe quedar otra vez fuera del proceso de paz en Colombia. Para ello hay que trabajar con los países «acompañantes». Entre ellos, fundamental el trabajo que hizo y hace por la paz Venezuela y su legítimo Presidente, Nicolás Maduro. Sin asumir esto no es posible ayudar”, indicó en su cuenta oficial de Twitter.
España no debe quedar otra vez fuera del proceso de paz en Colombia.
Para ello hay que trabajar con los países "acompañantes". Entre ellos, fundamental el trabajo que hizo y hace por la paz Venezuela y su legítimo Presidente, Nicolás Maduro.
Sin asumir esto no es posible ayudar. https://t.co/DHzHNk8cFq— Enrique Santiago (@EnriqueSantiago) August 24, 2022
Es previsible que la medida de presión se ‘cuele’ hasta el seno del PSOE a través de José Luis Rodríguez Zapatero, quien se convirtió en el principal defensor de la dictadura venezolana en el extranjero. Al punto de que el propio Juan Guaidó tildó al expresidente español de “lobista de la dictadura de Maduro” y “blanqueador” de sus crímenes de lesa humanidad.
Por su parte, Juan Carlos Monedero se podrá convertir en la pieza que presione a Petro para que termine de aceptar la oferta de Sánchez y beneficiar al tirano Maduro, con quien ya reconoció que buscaría mejorar las relaciones diplomáticas.
Delegación secreta
No es un secreto para nadie que el Gobierno de Pedro Sánchez está usando a sus socios de extrema izquierda para seguir manteniendo negociaciones cordiales con la dictadura de Nicolás Maduro.
En julio de 2021, el PSOE-Podemos mandó una vergonzosa y ‘secreta’ «delegación del Estado Español» para negociar con el régimen chavista diversos aspectos.
A pesar del silencio del Ministerio de Asuntos Exteriores (en manos de Arancha González Laya), fue el Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores de la tiranía que desveló la presencia de “delegaciones del Estado Español y País Vasco” en el país latinoamericano.
Un ‘equipo diplomático’ que, según indica el ministerio chavista, estaba conformado por el eurodiputado Manu Pineda y los integrantes del Partido Comunista José Luis Centella y Marta Martín para representar al “Estado Español”.
A los que se sumaron, en representación del País Vasco, Iñaki Ruiz de Pinedo, diputado de EH Bildu; Alberto Garro, alcalde de Ziortza-Bolíbar (Puebla de Bolívar) y Asier Altuna, jefe de Relaciones Internacionales del partido Sortu.
Tanto la “delegación del Estado Español” como la del País Vasco celebraron un encuentro con el ministro chavista Jorge Arreaza, quien les recibió el pasado viernes 25 de junio para “estrechar los lazos de solidaridad”.
Fuentes próximas al régimen chavista confirman a Periodista Digital que “a través de una serie de reuniones y encuentros con importantes figuras” se abordaron aspectos que son considerados “estratégicos”.
En concreto, apuntan a que se pusieron sobre la mesa aspectos como “el rescate de Plus Ultra, la búsqueda de promover la eliminación de las sanciones internacionales de la UE al régimen y el respaldo español a las próximas elecciones regionales que el chavismo usará para intentar negar las acusaciones de usurpación de la presidencia”.