Hace poco más de un mes, entrevistado por Vicente Vallés en Antena 3 Noticias y ya vicepresidente del Gobierno socialcomunista, Pablo Iglesias confirmó sin ponerse colorado que estaba de acuerdo con el nombramiento de Dolores Delgado como Fiscal General del Estado.
Para tratar de justificarse un poco, argumentó que la ex ministra Delgado, en su momento, «pidió disculpas» por aparecer en los audios de Villarejo en los que llamaba «maricón» al actual ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, insinuaba que en un viaje vio a «tíos del Supremo y la Fiscalía con menores» o validó la estrategia de Villarejo para obtener «información vaginal» con ‘putas caras‘, porque era «un éxito garantizado».
Ahora, con motivo del supuesto ‘examen‘ de idoneidad que Dolores Delgado ha tenido que superar y ya colocada por Pedro Sánchez como Fiscal General para que le ayude a sacar a los golpistas catalanes de la cárcel y otras tropelías similares, los tuiteros se han lanzado en tromba a hurgar en la hemeroteca, para restregar por la cara a Iglesias y otros como él su incoherencia, falta de principios y hasta ridiculeces.
Está la cosa que arde, porque nunca la elección de un Fiscal General del Estado había levantado tanta polvareda como con Dolores Delgado.
Porque nunca, tampoco, nadie había dado el salto del Ministerio de Justicia a la Fiscalía de un día para otro.
Todo apesta: desde el momento elegido, en plena tensión en Cataluña y con la sensación de pucherazo judicial para exonerar a los presos; hasta la persona proclamada, de amistades tan siniestras como el comisario Villarejo.
Y entre lo rescatado del archivo, destaca lo que decía al respecto el propio Pablo Iglesias:
OJO.Septiembre de 2018.
Aqui, el hoy Vicepresidente de Gobierno se refería a la AMISTAD con Villarejo de la CLOAQUERA Dolores Delgado, que obstentaba el Cargo de Ministra de Justicia y a la que hoy RATIFICARAN como Fiscal General del Estado Español.
Qué os parece el CRISTALINO? pic.twitter.com/RCBqKP36ZK
— Eduardo Guillen. (@OrbitaEduardo) February 20, 2020
«No es aceptable que en este país haya ministros que sean amigos de tipejos como Villarejo».
Son las palabras literales del líder de Podemos y hoy vicepresidente, pronunciadas con Sánchez en La Moncloa y con Dolores Delgado reprobada en el Congreso.
El viraje del partido morado, transformado ahora en paladín de la Fiscal General, es de aúpa:
Hace un año y medio Podemos pidió la dimisión de Dolores Delgado para “apartar de la política a quien tenía amistad con las cloacas”. Ahora alguien les ha contado que pidió perdón y se lo han creído y no pasa nada porque sea Fiscal General del Estado. Vivir para ver. pic.twitter.com/nEsF8yjry4
— Juan Ignacio Zoido (@zoidoJI) February 18, 2020
Este último mensaje, del exministro del Interior Zoido, también tiene mucha miga e incide en la escandalosa contradicción de Podemos, cuyo representante casi balbucea para sobrevivir al interrogatorio en RTVE.
Las palabras de Rafa Mayoral sugiriendo que Delgado les pidió perdón, pero que no sabe cuándo ni dónde, entran de lleno en la antología del disparate.
Y uno más.
Petición de @Ortega_Smith a Dolores Delgado: «Si es usted nombrada fiscal General del Estado, cámbiele el nombre. Ya no le llame Fiscalía General del Estado, llámele Fiscalía General Socialista y nos ahorraríamos todos muchas explicaciones».
? Un RT si piensas lo mismo pic.twitter.com/hVBf5e3ZVY
— pedro pineda celis (@pedropcelis) February 20, 2020
La contundente réplica de Javier Ortega Smith, de VOX, unida a la de Edmundo Bal en Ciudadanos o todas las del PP, resumen el impacto final de esta más que polémica designación con muy pocas pero elocuentes palabras:
«Si es usted nombrada fiscal General del Estado, cámbiele el nombre. Ya no le llame Fiscalía General del Estado, llámele Fiscalía General Socialista y nos ahorraríamos todos muchas explicaciones».