Antes del 41º Congreso Federal del PS ( antes PSOE) :
«Sevilla tiene un color especial / Sevilla sigue teniendo su duende / Me sigue oliendo a azahar / Me gusta estar con su gente…» […]
Así de bien nos la describen los hermanos «Calatrava» cuando nos la cantan, aunque sus autores no sean ellos, si no Cesar Cadaval –uno de los «Morancos»– junto a su amigo Miguel Ángel Magüesin.
Después del 41º Congreso:
«Sevilla no tiene ese color especial /ni sigue teniendo duende/ ni sigue oliendo a azahar /aunque si nos gusta su gente…» […]
¿La culpa…? Está vez no fue del «Chá-chá-chá» –como les hubiera gustado a Gabinete Galigari– si no de Pedro Sánchez que ha querido valerse de su sevillano y fidelísimo mamporrero Juan Espadas –actual secretario general del PS andaluz– y por haber elegido a la «perla del Guadalquivir» (la antigua Hispalis romana ) como sede y, para con la excusa del Congreso, poder darle a su insaciable «ego» un exclusivo y público baño de masas durante su asegurada reelección como Secretario General del PS, ese Partido –creado a su propia imagen y semejanza– por sus fieles afiliados y paniaguados súbditos, todos a una, como en los multitudinarios y habituales «Congresos del Partido de Trabajo» de Corea del Norte, siempre presididos por el líder supremo, el autocrático y represivo «Kim Jong-Un», quien, antes o después, acabará siendo juzgado y rendirá cuentas ante la Corte Penal Internacional de la Haya, por sus crímenes de «lesa humanidad».
¡ Pero no, que no cunda el pánico ni piensen mal ni se preocupen los entusiastas seguidores de la social y comunista dictadura sanchista
por el futuro de su líder, el gran autarca Sánchez !. Él aunque, no vaya a ser juzgado por la «Corte Penal Internacional», es muy posible que sea defenestrado política y judicialmente condenado al más puro ostracismo, víctima de las multiples y variadas corruptelas que rodean y estrechan, cada día más, su íntimo círculo personal, familiar y político: el del «Koldogate» y todos sus asociados, por delitos de estafa agravada, y falsedad de documentos contra la Hacienda Pública; el del ex ministro «Ábalos», por los delitos de pertenecer a organización criminal, tráfico de influencias, de cohecho y de malversación en el caso Koldo; por corrupción privada, tráfico de influencias, cohecho e intrusismo laboral, el de su mujer, «Begoña Gómez»; el de su hermano, el bidirector de Auditorios «Ramón Sánchez» por prevaricación, malversación y tráfico de influencias y, por último, el de «Víctor de Aldama» –vinculado a presuntas prácticas que incluyen el desvío de fondos públicos, sobornos, tráfico de influencias y varias operaciones financieras opacas — por su presunta implicación en cuatro de las grandes «tramas de corrupción» del Gobierno de Sánchez : la de «Hidrocarburos», el «caso Koldo» o «caso Ábalos», el «caso Begoña Gómez» y, en el suyo propio o el «caso Aldama».
Ha sido el congreso de la magna exaltación del «puto amo» Sánchez (omnes dixerunt atque plauserunt eum), de las pinochescas trolas, de las estulticias más grandes jamás oídas, de los mil cien delegados que allí se reunieron –no para elegir a la nueva Ejecutiva y a los miembros regionales del Comité– si no para ratificárlos oficial y públicamente.
«Todo»en ese congreso estaba de antemano amasado y cocinado al más puro estilo «juche» norcoreano ( con total el autonomía, autosuficiencia, e independencia), ya que «todo» lo allí expuesto para ser votado ha sido una auténtica metida, un paripé y un engaño manifiesto. A estas alturas de la «comedia» ¿quién se va a creer que el «puto amo» –del que depende absolutamente todo e incluso …hasta la Fiscalía General– va a permitir que le elijan a su Ejecutiva Nacional y le nombren a los miembros de su sanchista Secretaria General?
Quienes así piensen, no le conocen y, como diria Dante, ¡que pierdan toda esperanza…! A él, al caudillo, al duce, al Rey Sol…al «puto amo» Sanchez, que –pese a no haber ganado nunca ninguna elección general– unejerce el poder como un tribal reyezuelo aunque no gobierna nadie le impone nada, salvo que lo necesite para seguir ejerciendo su absoluto poder –como ha ocurrido con sus múltiples chantajes por parte de Puigdemont, EH-Bildu, el PNV, Sumar y el resto de partidos de las extremas izquierdas– pese a que él, debido a su sociopática mitomania, afirme que se trata de un necesario pacto político para que «España siga avanzando por la izquierda» hacia el total desarrolla y progreso. Lo peor de todo esto, es que hasta él mismo se lo cree.
Para sus «ministeriados-vasallos», como lo es, su fiel «cerbero», el ministro de Transportes Óscar Puente (et alteri) el título que mejor le pega de todos, es sin duda, el de «PUTO AMO», a secas. Aunque en el fin de semana, el «triunvirato» de Pedro Sánchez –con Maria Jesús Montero y Santos Cerdán– quiso convertir el hispalense recinto del «Fibes» en una pésima, burda y grotesca «mala-copia» del bíblico y galileo «Monte Tabor», el de la «Transfiguración», –salvando las insalvables, infranqueables y abismales diferencias entre protagonistas–, Sánchez no brilló con la típica y escatologica «luz tabórica», como a él le hubiera gustado, si no que, una vez más, la única luz con la que brilló fue con un tenue y artificial reflejo de sus permanentes mentiras y promesas siempre incumplidas.
Y si no ¿a qué viene el anunciar y prometer, a bombo y platillo, que el Ejecutivo creará << una gran empresa pública de vivienda capaz de construir y de gestionar viviendas desde la administración del Estado>>, cuando un mes antes del 28-M –-en el Pleno del Senado del 25 de abril de 2023– anunció que su Gobierno iba a «habilitar unos 183.000 inmuebles con un alquiler asequible»?.
¿Por qué no les pregunta a los «palmeros» (los isleños, ¡ojo! no confundir con los aplaudidores oficiales) damnificados por la erupción volcánica, en qué han quedado sus promesas, de aquel 19 de septiembre de 2021, en las que juró que […] «…ningún palmero se quedaría sin casa y anunció un plan para realojar a todos los vecinos que perdieron su hogar?».
Por eso, lo único que se me ocurre decir es aquello que el carpintero le decía a la escultura de San Sebastián, esculpida por el mismo para la iglesia del pueblo:
«En mi huerta te criaste / ciruelo te conocí / los milagros que tú hagas /
que me los cuelguen a mi» .
Solo le faltó salir a hombros como solía hacerlo el famoso diestro y matador sevillano «Juan Belmonte Garcia». Seguramente sus elatos compañeros sanchistas –Narbona, Montero, Cerdán y los 54 miembros de la nueva Ejecutiva– opinan todo lo contrario,»por la cuenta que les trae» y recuerdan su advertencia: «¡ o conmigo o contra mi !» …Si alguien tuviera alguna duda, al respecto, que contacte con Juan Lobato y se lo pregunte. La respuesta del «contra mi» es bien conocida por todos y… «cuando las barbas de tu conmilitón veas rapar, pon las tuyas a remojar».
El Congreso hispalense ha sido un auténtico cónclave sanchista de pública y manifiesta aclamación al líder, a su mujer Begoña, a gran parte de su Ejecutivo, a su círculo politico y, sin olvidar, como no podía ser de otra manera –a los loados «ERES»-icos ex presidentes Griñan, Chaves y, a la ex consejera de Hacienda Magdalena Álvarez, todos condenados por prevaricación y malversación– recibidos por «el respetable» como auténticos adalides entre ensordecedores aplausos, ovaciones y gritos de ¡Antonio! ¡Manolo y Magdalena!
Con todo este reconocimiento fogoso y exultante canto a la libre corrupción del Gobierno de Sanchez, a sus protagonistas y a su singular ruleta de mentiras, calumnias, insultos, injurias y descalificaciones contra Feijóo , Díaz Ayuso, Abascal y contra todos los que disentimos abiertamente de su ideologia «progresista», «socialcomunista»
feminista» y»dictatorial»:
«Sevilla ya no tiene ese color especial /ni sigue teniendo duende/ ni sigue oliendo a azahar/ pero NOS GUSTA su gente.[…].
Pedro Manuel Hernández López, médico jubilado, Lcdo en Periodismo y ex senador autonómico por