El ¡y tu más!, señorías del Gobierno,
No es un argumento, es una falacia,
Y convertir con ella en un infierno
La Sesión de Control, tiene poca gracia,
Más bien ninguna, porque lo que demuestra
Que con ella se acepta con contumacia
Lo mal hecho, y, a diestra y siniestra,
Culpar de lo mismo que se les acusa,
No es desde luego una jugada maestra;
Es humo de paja, es una excusa,
Un recurso del que siempre echan mano,
Ministros y Ministras de mente obtusa;
Dicho en Román paladino, en igual plano
Todos y todas, sin eco a ningún salvo
La que tiene más teclas que un piano,
Borrega a fuer de afeites de rostro zalbo,
Que nunca se cansa de balar en vano …
Para entendernos, ¡sí!, la Carmen Calvo,
Con su querencia a pacer en secano.