El eterno baile de opuestos que se atraen: Una historia en blanco y negro
Trussardi Uomo y Trussardi Donna, las icónicas fragancias que se lanzaron en 2011 para conmemorar el centenario de la marca Trussardi, se han convertido en la expresión del estilo como necesidad y de la elegancia como emblema y modernidad a través de la búsqueda continua de la belleza, de la autenticidad, de lo real.
Blanco y negro, masculino y femenino, revelación y misterio, fortaleza y ligereza: este juego de opuestos que se atraen y que acaban uniéndose podría ser eterno.
En los perfumes Trussardi encontramos un equilibrio entre el amor y la pasión, la razón y el deseo, el ser y el tener.
Trussardi Donna
Pertenece a la familia olfativa floral oriental.
Sus notas de salida crean un aura luminosa y frutal con una sabia combinación de yuzu, cidra y frutas de agua.
En las notas de corazón florece la feminidad con el azahar, los lirios de agua y el té de jazmín.
Las notas de fondo yuxtaponen la profunda sensualidad de las maderas: cedro, sándalo, pachulí blanco y vainilla.
Su delicado y ligero frasco en cristal blanco con un ribete metálico dorado evoca la sensual presencia de una mujer moderna capaz de interactuar con cualquier hombre con serenidad y confianza en sí misma.
PVP: 97€ / 100 ml.
Trussardi Uomo
Pertenece a una familia olfativa típicamente masculina: la fougère amaderada.
Las notas de salida poseen la fresca elegancia italiana del limón, la bergamota, el gálbano, y la nuez moscada.
En las notas de corazón encontramos la mezcla viril y refinada de salvia, geranio y violeta.
La apoteosis de la fuerza sensual llega con las notas de fondo de pachulí y almizcle con acordes de cuero.
El frasco muestra un diseño refinado y contemporáneo en negro intenso, brillante y decidido
que contrasta con el ribete metálico dorado y un cilíndrico tapón de zamak dorado con el emblema en la parte superior. También decoran el frasco el nombre y el emblema dorados.
PVP: 89€ / 100 ml.