Carlos Sosa redacta una querella contra Soria desde el ordenador de una juez que es su pareja

El periodismo judicializado de Canarias Ahora

El director arremete contra El Mundo y contra el PP a los que acusa de querer desacreditarle

El periodismo judicializado de Canarias Ahora
Carlos Sosa, director de Canarias Ahora.

El director de Canarias Ahora ha sido pillado como el carrito del helado. Carlos Sosa asume implícitamente la redacción de una demanda contra el líder del PP en las Islas con el asesoramiento jurídico y ¿sentimental? de la jueza María Victoria Rosell, su actual pareja y que, por tanto, debiera de haberse abstenido en esta causa. Aun así, el periodista considera la información de la que se hace eco El Mundo como un ataque preparado contra él y contra la magistrada y a resultas de la toma de declaración de ésta a una imputada por el llamado caso hemodiálisis.

Su diatriba contra el diario de PedroJota y la cúpula del PP debería de haber comenzado con desmentir algo tan grave como que María Victoria Rosell ya era su pareja cuando presentó la querella. Pero no. Literalmente, la información del diario de Unedisa dice explícitamente:

«Este periodista –Carlos Sosa, director del grupo de comunicación Canarias Ahora,–, según informaron fuentes cercanas al caso, mantiene una relación sentimental con la portavoz de Jueces para la Democracia y jueza instructora Victoria Rosell».

«Cuando Sosa presentó la querella, ambos ya estaban juntos», explica el periódico ‘El Mundo’, que también dice que «estas fuentes apuntaron que existen indicios claros de que fue precisamente desde el ordenador de la jueza Rosell desde donde se elaboró el texto de la querella que finalmente presentó Sosa contra Soria».

Sosa afirma en su top secret que «Todo apunta, decía El Mundo, a que la juez Rosell redactó en su propio ordenador la querella que en 2008 un periodista interpuso contra el máximo responsable del PP en las islas, José Manuel Soria. El ‘todo apunta’ de Fernando Lázaro se refiere exactamente al nombre del pc creador del archivo de Word que, con el apellido de la magistrada, aparece en las «propiedades» del fichero que en su día publicó a El País conteniendo la denuncia. Eso ha bastado al periódico de PedroJota Ramírez para atribuir a la juez la autoría del texto, sin mayores confirmaciones, sin comprobar a quién pertenece exactamente ese ordenador ni a quién pudo pertenecer en el pasado».

Pero lo verdaderamente llamativo es, prosigue el director del Canarias Ahora, que, «estando a disposición de cualquiera esas propiedades del archivo de Word hace dos años y cuatro meses (la denuncia se presentó en agosto de 2008), sea ahora cuando el diario de cabecera del PP lo descubre y lo saca a la luz. Justo, justito, el mismo día que declaraba la doctora Palop y después de que el ordenador profesional de la magistrada, el que tiene en su despacho de Granadera Canaria, sufriera un extraño accidente el fin de semana del 13 y 14 de noviembre pasado. Alguien lo exprimió tanto esos dos días, que reventó el disco duro, según explicó un técnico del Cibercentro del Gobierno de Canarias».

Sosa, como no podía ser de otra manera, manifiesta que «las casualidades hay que ponerlas en cuarentena cuando las protagoniza el PP de José Manuel Soria y sus especializados satélites mediáticos (el titadine, el faisán, Garzón…) Por lo tanto, debemos sospechar cualquier cosa (y ninguna buena) ante la aparición de esta noticia en El Mundo dos años y cuatro meses después de la presentación de la denuncia del salmón, el mismo día en que se iniciaban los interrogatorios de unas diligencias relacionadas con el caso Roldós, y poco después de que el disco duro profesional de la magistrada quedara en manos del Gobierno de Canarias a través de una empresa privada que gestiona el Cibercentro, al que están conectados todos los ordenadores de la Administración de Justicia en Canarias a través del disparatado sistema Atlante».

Sentencia del director del Canarias Ahora que «la extrañeza que produjo a la juez el estropicio en su ordenador tras un fin de semana de frenética actividad sin su concurso ni el de ningún funcionario de Instrucción 8, la llevaron a interponer al día siguiente, el 16 de noviembre, una denuncia en el Juzgado de Guardia relatando todas aquellas extrañas incidencias. Paralelamente, la juez pidió a la Dirección General de Relaciones con la Justicia que le reparara el disco duro, donde estaba el trabajo de una década, y el Gobierno lo envió a reparar a Madrid. Ante la publicación de la noticia de El Mundo, Rosell ha reclamado formalmente que se lo devuelvan de inmediato, que lo mismo en él están algunas explicaciones».

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