Los servicios secretos de los gobiernos europeos, incluido el español, les han advertido que tras la caída de la última base del Califato Islámico en Baghuz, Siria, los yihadistas supervivientes de todo el oriente próximo tienen como objetivo las naciones de los infieles a las que achacan, junto a EE.UU. su derrota.
Desde su proclamación en 2014 el Califato yihadista gobernó ocho provincias en Siria e Irak y a seis millones de personas, muchas de ellas aterrorizadas por aquellos verdugos y guerreros, violadores de mente medieval y armas del siglo XXI.
Instauraron la versión más rigorista de la sharia, la ley islámica que incluso en versión suave sigue siendo machista y sanguinaria, bajo la dirección de Abu Bakr al-Bagdadi, el autoproclamado Califa, conquistador del mundo entero para Alá, con especial mención de Al-Andalus…
Siga leyendo aquí y vea a Salas
……..