José María Merino, autor de ‘La realidad quebradiza’ es un nombre imprescindible entre los autores de cuento españoles y prácticamente un clásico, por la calidad de su obra, de las letras contemporáneas.
A lo largo de más de tres décadas y con una decena de libros de cuentos y microrrelatos, Merino ha ido construyendo un universo propio donde los elementos fantásticos, la sorprendente imaginación, el misterio, la memoria y lo inesperado se unen para lograr una literatura única y excepcional.
Esta antología, donde además se incluye una extensa entrevista inédita, preparada por Juan Jacinto Muñoz Rengel selecciona lo mejor de cada uno de sus libros para ofrecer al lector una magnífica oportunidad de adentrarse en su obra.
«La lectura de este libro en sí misma puede resultar temeraria. Quizás usted también debería firmar algunos formularios, como en su día hizo nuestro paciente, en los que declare que ha sido informado. Estos relatos pueden alterar su concepción del mundo, y dejar todo tipo de secuelas. Graves secuelas. Síntomas feos y fatales. En serio. Nosotros declinamos toda responsabilidad desde este momento. Luego no diga que no se lo advertimos», del prólogo de Juan Jacinto Muñoz Rengel.
En cuanto a la literatura en la educación el autor considera que es la mejor herramienta para conocernos:
«Debería ser importantísima, no porque yo me dedique a ello sino porque creo que la literatura es el instrumento que hemos tenido los seres humanos, el instrumento más adecuado para saber como somos. No hay otro igual, ni la ciencia, ni la psicología, ni la filosofía, ni la historia; definen tan bien lo que es la profundidad del corazón humano, nuestros comportamientos, por qué somos traidores o generosos, por qué nos enamoramos o matamos; en fin, eso está en la literatura. Y yo creo que la literatura es fundamental para conocer lo que hemos sido, lo que somos y lo que constituye nuestra condición. Y yo creo que la literatura en el sistema educativo está muy mal tratada.»
En cuanto los recortes en educación le parecen una torpeza:
«Me parecen una profunda torpeza los recortes, una cosa es la reestructuración, tal vez la educación requiera reestructurar los elementos que tenemos, las estructuras ordenarlas mejor, etc; y otra cosa es recortar. Porque recortar, vamos a ver, si sabemos menos; es decir, si somos más tontos, ¿cómo vamos a poder resolver los problemas que se nos presentan? Yo creo que los problemas sólo se pueden resolver con formación, con conocimiento; y ese es un campo en el cual yo creo que no se puede escatimar.»
Con la colaboración de Marina López y Sandra Besga.
