Paulina Rubio se enfrenta a las acusaciones de quienes afirman que estaba borracha durante su último concierto, la misma polémica de la que se defendió Amaia Montero en el mes de junio y por la que acabó pidiendo disculpas. La que sería la nueva coach de La Voz en Antena 3 actuó junto a Marta Sánchez y Belinda en un evento llamado Ídolos celebrado en el Palacio de los Deportes de Ciudad de México.
Los asistentes acusaron a la mexicana, tal y como dice el vídeo subido a YouTube que ya tiene más de 25.000 reproducciones, de cantar «desafinada y desentonada». La artista entró tarde a la canción y olvidó la letra. Justo después dio la espalda al público. En Twitter se ha comentado que la mexicana se ha «marcado un Amaia Montero».