Alto Paraná, vicaría episcopal para la Vida Consagrada, vicaría episcopal para la Cultura, vicaría para la Misión, vicaría para la Catequesis y la vicaría para las Parroquias
Tras la visita de un enviado del Vaticano, el obispo Rogelio Livieres informó el viernes la eliminación de seis vicarías que eran cuestionadas en la diócesis de Ciudad del Este.
«Luego de un estudio hecho por el Consejo Episcopal en pos de un mejor trabajo pastoral, viendo la nueva organización del clero diocesano, y en vista de que algunas de las vicarías ya no realizan una labor pastoral dentro de la Diócesis, se dispuso suprimir seis vicarías«, dijo un comunicado publicado en la página digital del obispado.
Los decretos de Livieres eliminaron los organismos Alto Paraná, vicaría episcopal para la Vida Consagrada, vicaría episcopal para la Cultura, vicaría para la Misión, vicaría para la Catequesis y la vicaría para las Parroquias.
Ninguno de los organismos suprimidos estaba bajo la dirección del sacerdote argentino Carlos Urrutigoity, presuntamente comprometido en conductas inapropiadas hace unos 15 años en Estados Unidos. Un informe de la diócesis afirmó que tanto en Estados Unidos como en Paraguay no existen denuncias con pruebas que indiquen a Urrutigoity como pedófilo.
Monseñor Livieres no hizo declaraciones.
El enviado vaticano, el cardenal español Santos Abril y Castelló junto con monseñor Milton Luis Tróccoli, del arzobispado de Montevideo, Uruguay, realizaron la semana pasada en la diócesis de Ciudad del Este, a 340 kilómetros de Asunción, una investigación para determinar si eran correctas las denuncias mediáticas efectuadas por el laico local Javier Miranda, acerca de un crecimiento ficticio de la diócesis.
Un vocero del Vaticano recientemente informó que el seminario a cargo del obispo Livieres recibió la orden de suspender las ordenaciones sacerdotales previstas para agosto.
(Rd/Agencias)