Los esqueletos encontrados podrían llevan ahí desde 2009 y según la iglesia estuvieron enterrados bajo el suelo pero los exhumaron para hacer una reforma
Una mujer que visitaba una iglesia al sur de Suecia se llevó un enorme susto al encontrar las calaveras y restos óseos de 80 personas dentro de bolsas de IKEA. El macabro descubrimiento ha enfadado a los residentes de la localidad que reividican que los muertos deben ser tratados con más respeto.
La mujer que encontró los restos, Kicki Karlén, aseguraba que había «un montón de calaveras y huesos apilados». Los esqueletos encontrados podrían llevan ahí desde 2009 y según la iglesia estuvieron enterrados bajo el suelo pero los exhumaron para hacer una reforma y nunca más fueron debidamente enterrados de nuevo.
Según publican los medios locales, Karlén se mostró «muy enfadada», enfado que aumentó al descubrir que algunos de los fieles de la iglesia sabían de la existencia de los restos y el estado en que estaban almacenados desde hace cinco años.
(RD/Agencias)