Su grandeza como Padre omnipotente se manifiesta plenamente sobre la cruz gloriosa de su Hijo
El Papa ha invitado a abandonarse «confiadamente en Dios Padre y en su misericordia omnipotente, que salva» y a confiar «en su perdón» incluso cuando se equivoca el camino, durante su audiencia general en el Vaticano.
Además, el Pontífice ha continuado su serie de catequesis sobre la oración del Credo y se ha detenido en la figura de Dios «Padre omnipotente» y en la revelación bíblica que «ayuda a comprender esta expresión«.
Benedicto XVI ha remarcado que «Dios es Padre» porque ha elegido y bendecido a la humanidad «antes de la creación del mundo» y ha hecho a los hombres «realmente sus hijos en Jesús«, porque «acompaña la existencia, da su Palabra, sus enseñanzas, su gracia y su Espíritu».
En esta línea, el Papa ha apuntado que Dios «es un Padre bueno, que no abandona, sino que sostiene, ayuda y salva con una fidelidad que sobrepasa infinitamente la de los hombres».
Asimismo, ha remarcado que «su grandeza como Padre omnipotente se manifiesta plenamente sobre la cruz gloriosa de su Hijo» y ha explicado que «no es una fuerza arbitraria que cambia los acontecimientos o anula el dolor, sino que se expresa en la misericordia, en el perdón, en la incansable llamada a la conversión y en una actitud de paciencia, mansedumbre y amor«.
En su saludo en lengua española, el Papa se ha detenido en particular en los grupos provenientes de España, México, Chile y demás países latinoamericanos y les ha invitado a «ser constantes en la fe, dando testimonio de Cristo, y a vivir en plenitud el Credo».
(RD/Ep)