La renuncia fue una decisión libre, bien pensada, bien reflexionada y también bien rezada. Estas cosas que se han leído recientemente son inventadas y no son verdaderas. El Papa Benedicto no es una persona que cede a presiones. Todo lo contrario
(Jesús Bastante/Agencias).- «No es verdad, es inventado, una afirmación sin fundamento«. El prefecto de la Casa Pontificia, y secretario personal de Benedicto XVI, Georg Gaenswein, ha vuelto a negar la existencia de presiones para que el Papa emérito renunciara al Pontificado.
En una entrevista con la televisión italiana, a pocos días de que Joseph Ratzinger cumpla los 90 años -lo hará el domingo de Resurrección, 16 de abril-, Gaenswein vuelve a recordar el momento de la histórica renuncia del pontífice alemán, anunciada el 11 de febrero de 2013, y sustanciada el 28 de febrero siguiente, y desmiente los rumores que hablaban de una supuesta mediación de Barack Obama para provocar su marcha.
«He hablado con él, y me dijo que no era cierto», subrayó Gaenswein. «La renuncia fue una decisión libre, bien pensada, bien reflexionada y también bien rezada. Estas cosas que se han leído recientemente son inventadas y no son verdaderas. El Papa Benedicto no es una persona que cede a presiones. Todo lo contrario», precisó.
«Cuando hubo desafíos y cuando se tuvo que defender, tanto a la doctrina como al pueblo de Dios, fue justamente él quien se comportó de manera ejemplar: no huyó cuando llegó el lobo, sino que resistió, y esto nunca habría sido un motivo para dejar el pontificado ni para renunciar», recalcó el secretario de Ratzinger.
Sobre las relaciones entre Francisco y Benedicto, Gaenswein las calificó de «muy cordiales, muy buenas», e informó que, con frecuencia, ambos hablan, y Bergoglio visita a Ratzinger.
«Francisco es el sucesor de Pedro. Ratzinger fue el Papa, pero renunció y se retiró a rezar, que es una forma de ayudar a su sucesor en el gobierno de la Iglesia, que no se logra sólo con las palabras y las decisiones, sino también con la oración y con el sufrimiento», recalcó el arzobispo alemán..
«No hay ningún malentendido. Sí hay interpretaciones diferentes, a veces un poco maliciosas, esta es la vida, es el mundo y también es la Iglesia. No veo ninguna confusión. A veces veo alguna nostalgia y algún malentendido, pero una confusión sobre los papeles, sobre quién es el Papa, esto yo no lo percibo», recalcó.
Preguntado sobre la importancia del «lobby gay» en el Vaticano, Gaenswein matizó que «se ha exagerado su importancia». «En su momento se dio una respuesta y una solución, pero hablar de ‘lobby’ de poder, no sólo es exagerado, sino ¡cien veces exagerado!«, afirmó.