(PD).- Un gol de Samuel Eto’o mediada la segunda parte plasmó la clara superioridad del FC Barcelona sobre el Athletic Club en un choque igualado en su primera mitad, claramente de los visitantes en la segunda y que deja a los locales en posiciones de descenso.
El equipo azulgrana solventó con una faena casi de aliño la cada vez menos complicada visita a San Mamés, donde, eso sí, notó la ausencias de Xavi, en la circulación de balón, y Messi, en las jugadas de encarar.
Los de Pep Guardiola, no obstante, contaron con un Iniesta más eficaz y espectacular que muchos de los candidatos al Balón de Oro y un Eto»o sino brillante si incisivo.
Con eso y poco más aguantó a un Athletic claramente de más a menos: voluntarioso y con cierta llegada al principio, e incapaz tras el descanso. Con la visita al Santiago Bernabéu en siete días, el futuro del conjunto rojiblanco se cierne más oscuro de lo que pueda parecer su ya dolorosa caída a las últimas posiciones de la tabla.
Guardiola dejó de inicio a Messi y Puyol en el banquillo, dio entrada en medio campo al canterano Víctor Sánchez y colocó a Iniesta de extremo derecho para acompañar a Eto’o y Henry en la delantera.
Joaquín Caparrós, por su parte, dejó a Susaeta fuera del once inicial, en el que Garmendia se situó junto a Llorente en un ataque con el que el sevillano repitió la apuesta que tan buen resultado le diera en la segunda parte del choque del año pasado.
El partido empezó muy movido, con la defensas fáciles de superar y llegadas a ambas porterías que pudieron haber hecho mucho daño a nada que los delanteros hubiesen estado más vivos, sobre todo los del Athletic, y los porteros menos brillantes.
Para el minuto 8 ya se contabilizaban cuatro llegadas con peligro, dos a cada área. Las del Athletic, un golpe franco directo de David López, bien respondido por Valdés, y una contra mala gestionada por Garmendia; las del Barça, ambas de Eto’o. Primero cortó una cesión de Balenziaga a Iraizoz, pero no pudo evitar que se le fuese largo el regate al portero; y después disparó desde la frontal, tras un buen recorta. El lanzamiento lo despejó bien el meta local. Se paró un tanto el partido ante la decisión de Caparrós de ceder el campo al rival y la falta de fluidez en la circulación del equipo azulgrana, que acusó la ausencia de Xavi.
Mediado el primer tiempo, el partido volvió a coger impulso y el Athletic atosigó al Barcelona con tres córners seguidos y dos nuevas ocasiones, la primera un precioso golpe franco directo de Yeste a la escuadra, que de nuevo despejó Valdés. Una colada hasta la línea de fondo y un remate a bote pronto de Garmendia llegando desde atrás hasta el punto de penalti precedieron a la segunda gran ocasión de Eto’o, un cabezazo tras córner que Iraizoz salvó junto al palo.
Tras el descanso, pronto amenazó el choque con ser un monólogo visitante. Aunque sin la brillantez que acostumbra, el equipo de Guardiola empezó a llegar con asiduidad a la meta local.
Así, Víctor Sánchez, Touré Yaya e Iniesta probaron fortuna con fuertes disparos que no lograron su objetivo. Sí lo hizo en cambio Eto’o, que, tras ganar su enésima disputa a Amorebieta, fusiló a Iraizoz con otro poderoso disparo desde la frontal. La sospecha de que el encuentro se ladeaba hacia el lado visitante se confirmaba y el Barcelona dispuso de buenas oportunidades para el 0-2.
Entre ellas, un centro de Iniesta que Amorebieta cabeceó sobre su propia portería para que Iraizoz realizase un nuevo paradón. O un mano a mano de Eto’o ante el meta local que el camerunés mandó fuera.
El Athletic ya daba para poco. Apenas para un poco de guerra a balón parado. Pero, aún así, su impericia le retrataba. Como cuando Vélez despejó más que remachó a dos metros de la portería y en fuera de juego un remate de cabeza de Amorebieta a saque de córner. En esa dinámica, se terminó el encuentro.
