El Chelsea de José Mourinho se gastará este verano un total de 130 millones de euros para poder reforzar al equipo en todas las áreas. Desde la defensa hasta la linea de ataque.
El magnate ruso, Roman Abramovich, está dispuesto a realizar un sacrificio para ser un equipo más poderoso de cara a la próxima temporada y disputar todos los trofeos.
Mourinho quiere a un jugador por cada posición. En la defensa se ha fijado, si sale David Luiz, en Kurtz Zouma -Saint Etienne-; en el jugador del Oporto, Mangala; en el defensa del Southampton, Lucas Shaw y en el atacante de la Juventus, Paul Pogba.