El Real Madrid ha dejado claro que es ahora el mejor equipo de Europa.
El 0-0 final no es justo, pero el fútbol es así.
En el Camp Nou, empate. Fuera, quema de contenedores y cargas policiales.
El Clásico fue, como se esperaba, algo más que un partido, aunque ni hubo incidentes demasiado gordos ni tampoco goles sobre el terreno de juego.
Al Real Madrid de Zidane, con un Bale estupendo y un Isco de categoría, le faltó o mejor dicho le sobró una cuarta -la que el VAR decidió que había un fuera de juego- para salir triunfador del Camp Nou, pero ha zanjado el clásico de este 18 de diciembre de 2019, poniendo una pica en el Camp Nou.
Se cambiaron los papeles en el clásico porque el Barcelona apenas jugó al fútbol, remitido a la fiabilidad de Piqué en defensa y a la genialidad de Messi en las contras, y gobernó el duelo el Madrid, un equipo mucho más serio y generoso, un bloque de verdad.
Pero faltó puntería en las áreas y el clásico se quedó sin el festejo del gol.
Gareth Bale, estuvo superior.
Aunque el Barcelona intentó dormir el encuentro con el balón entre los pies, se quedó con las ganas porque la presión alta del Real Madrid y después su generoso repliegue en campo propio evitaron el fútbol azulgrana habitual.
Isco y Semedo.
No había líneas de pase, no había jugadores que recibieran entre las líneas y tampoco había de inicio mucho Messi, aunque demostró su clase y su valía en la segunda parte, con evidente peligro casi cada vez que tocaba la bola.
Fede Valverde, durante el Clásico entre FC Barcelona y Real Madrid.
Así, desnortado ante el fútbol bloque del Madrid –todos se movían acompasadamente hacia delante y hacia detrás, también hacia los costados-, el Barcelona se contentó con jugar como hacía el Madrid y defiende su heráldica, a la contra y con transiciones vertiginosas.
Luis Suárez y Varane.
Pero los centros de Alba no encontraron rematador y el balón se instaló en el campo contrario, donde el Madrid apretó de lo lindo.
Real Madrid – Barcelona.
Para su infortunio, Piqué ha recobrado su mejor nivel y Ter Stegen sigue siendo un portero referencial.
