Carlos Sainz quiere ganarse el corazón de los seguidores de Ferrari.
El piloto español se mostró emocionado en la previa al Gran Premio de Italia, en busca de un gran resultado en casa, a pesar de venir de un mal fin de semana en Países Bajos pero con el problema identificado.
«Es muy distinto, tengo muy buenos recuerdos del año pasado. Ya pude empezar a sentir lo que es venir aquí a Monza. Este año ha sido un paso más, la cantidad de apoyo como piloto de Ferrari es una locura», dijo, después de ser segundo el año pasado.
Ahora en Ferrari, Sainz espera que la afición roja dé un plus. «El año pasado fue la carrera más dura y sabemos que tenemos debilidades que arrastramos de la temporada pasada, pero este año el coche debería ser más fuerte y a la vez hemos visto algunas sorpresas. Espero que los ‘tifosi’ nos aporten esa décima que quizá nos falte», apuntó.
Además, el piloto madrileño apuntó que la mala carrera el domingo pasado no debería ser un problema. «Analizamos bien qué sucedió, ha sido mi peor carrera como piloto de Ferrari. Me faltó ritmo. Después de analizarlo averiguamos que el coche no estaba rindiendo al 100% y sabemos cuál es el problema. Ahora estoy calmado y me pude centrar en Monza», afirmó.
«La gente piensa que es fácil adelantar aquí, pero no es fácil. La clasificación va a ser importante para la salida en el sprint. Veremos, las salidas son mis prioridades», añadió.