Pierde pasajeros a marchas forzadas y se desangra a un ritmo de 2 millones diarios

Malaysia Airlines hace ‘vuelos fantasma’ tras estrellarse la compañía contra el infortunio

Aviones que tienen capacidad para 300 personas están despegando ahora con menos de diez pasajeros a bordo

La sangría es de espanto. Se pierden 2,16 millones de dólares cada día y no hay quien pare la hemorragia.

Y es que los aviones de Malaysia Airlines que tienen capacidad para 300 personas están despegando ahora con menos de diez pasajeros a bordo.

No importa que los billetes de primera clase se regalen. No cuela. El pasivo que no para de aumentar. Los sendos vuelos que protagonizaran las peores tragedias de la historia de la aviación civil, con tal sólo cuatro meses de diferencia, se cobra otra factura.

Ricardo Goncalves, un pasajero que viajaba desde Australia, compartió a través de Twitter la desolación que había en el vuelo. Apenas se ve a otras cuatro personas en toda la aeronave.

Hace poco más de un mes, el 17 de julio de 2014, el MH17 partía lleno desde Amsterdam, Holanda, con destino a Kuala Lumpur, Malasia. La mayoría de sus tripulantes tenía como destino final a Australia.

Pero todos murieron cuando sobrevolaban el este de Ucrania y un poderoso misil tierra aire lo derribó. También había salido con su capacidad cubierta el MH370, que partió de la capital malasia hacia China, pero desapareció inexplicablemente en el camino, a la altura de Vietnam.

Otra foto compartida en Twitter por Wan Ping Coombes, la muestra sola en otro vuelo, junto a su esposo y su hijo. La familia agradece los servicios de la compañía y parece disfrutar de la soledad.

El Estado malasio anunció su voluntad de comprar el 31% que aún no posee de las acciones. Así, se convertiría en una empresa 100% estatal. La junta directiva tiene que dar una respuesta en la próximas semanas.


Te puede interesar

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído